Los ciudadanos cada vez estamos mas convencidos de que los políticos que tenemos en nuestro país son los auténticos responsables de la mayor parte de los problemas que padecemos, incluso el Rey se ha sumado a la afición que los representantes públicos tienen por las fechorías.El Partido Popular lleva pocos meses gobernando y ya va dando bandazos como un pelele lastrado por la herencia recibida y azotado por los que mandan en esta Europa del siglo XXI, la Sra. Merkel, los banqueros y el capital especulador. Obligado por la ortodoxia que impone Alemania y el Banco Central Europeo, el nuevo Gobierno que preside el Sr. Rajoy ha elaborado unos Presupuestos para este año 2.012, ya aprobados por el Parlamento, donde se mete tijera a todos los ministerios, además, como hemos visto estos días, también se han recortado gastos en Sanidad y Educación. No va a ser suficiente para bajar el déficit hasta donde exige Bruselas, porque el miedo que ha provocado el abaratamiento del despido, los recortes de los salarios, las subidas generalizadas de tasas e impuestos y la caída en picado de las inversiones, acabarán por hundir el mercado interno y, en consecuencia, la recaudación fiscal. Pero esta es otra historia de la que tendremos tiempo de hablar largo y tendido.
El Secretario General del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, al que los españoles ya le han dicho muy claro, en las elecciones generales, la nula confianza que les inspira, como es su costumbre, sigue con sus gracietas y su dialéctica para imbéciles. Su última ocurrencia ha sido manifestar que "hay que tocar Defensa", pero no, naturalmente, para mejorar la dotación y operatividad de nuestras Fuerzas Armadas, que tienen que estar preparadas para cumplir con el mandato que les asigna la Constitución, sino para recortar, aún mas, los recursos que les son imprescindibles para sus misiones. Tampoco ha dicho nada el líder socialista de que regresen a casa los soldados que apoyan aventuras imperiales por el mundo o que ayudan a armadores privados a esquilmar los bancos de atún en aguas de África, incluso con buques, como pasó en el caso del Alakrana, que no enarbolan en popa la enseña nacional.
La responsabilidad ha impedido, hasta ahora, que tocáramos este asunto, pero hemos llegado a un punto en que es mas irresponsable soslayarlo. Nuestras FF AA se encuentran en una situación tal que no están dotadas ni capacitadas para, llegado el caso, poder cumplir con el artículo 8, párrafo 1, de nuestra Carta Magna (Las FF AA, constituidas por el Ejército de Tierra, la Armada y el Ejército del Aire, tienen como misión garantizar la soberanía e independencia de España, defender su integridad territorial y el ordenamiento constitucional). No lo están por falta de recursos humanos suficientes (la profesionalización total fue un tremendo error) y porque carecen de los medios logísticos y armamentísticos imprescindibles para una disuasión creíble y, llegado el caso, un despliegue de la Fuerza efectivo.
Rubalcaba juega con nuestra seguridad apuntándose al discurso de falso progresismo que pretende laminar los ejércitos. A todos nos gustaría un mundo sin armas y sin soldados, pero no estamos en el país de Alicia y el Secretario General del PSOE no tiene suficiente entidad para defendernos.
En los Presupuestos de este año el recorte en Defensa es del 8.8%, se queda en 6.316 millones de euros, 613 menos que el año pasado, de los que 351 corresponden a inversiones. Pero el pasado año el tijeretazo ya fue del 7%. Los recortes afectan fundamentalmente a los Programas Especiales de Armamento, donde los recursos llegan hasta el 34,9% menos, y donde ya se acumula una estratosférica deuda de 31.000 millones de euros.
España, la 12 economía mundial, ocupa, sin embargo, el puesto 122 en cuanto al porcentaje del PIB destinado a Defensa.
Se ha suspendido la construcción en Vigo de la sexta fragata F-100, la fabricación en Asturias del vehículo de infantería motorizada 8x8, y el programa de magnífico avión de transporte que se ensambla en Sevilla, el A-400M, corre serio peligro, entre un rosario de carencias y suspensiones que no vamos a pormenorizar. Miles de trabajadores en el sector armamentístico también irán al paro.
Pero al Secretario General del PSOE, Sr. Rubalcaba, todavía le parece poco.
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