lunes, 29 de abril de 2024

YO SIGO

 


La frase la hizo famosa el actor argentino Jorge Alberto Ripoli, más conocido por su nombre artístico, Joe Rígoli, que se hizo popular en la España de los años 70 con su personaje Felipito Takatún. Pero, ahora tenemos a Pedro Sánchez, que no solo ha hecho suya la frase, la ha convertido en arenga, y que no da risa, a mí me empieza a dar miedo. El presidente del gobierno, ferviente admirador (confesado) de Maquiavelo, otra vez ha desconcertado a todo el mundo, y digo bien, porque el desconcierto esta vez ha sido internacional. No hay precedentes en ningún país de un mandatario que se tome cinco días de reflexión para decidir si dimite o no dimite, y en España solo ha dimitido un presidente, Adolfo Suárez, y de sopetón. Sin embargo, yo si pensaba que Sánchez iba a dimitir, y me equivoqué, lo confieso, y es que acertar con las cosas que va a hacer o dejar de hacer este hombre es francamente difícil. Nos ha hecho creer que ni el mismo lo sabe. Tras la incertidumbre, tras el relato lacrimógeno, tras los socialistas llegados a Ferraz de todas partes de España con los autobuses pagados y tras el "Pedro, quédate" de compañeros y compañeras y socios y socias, Pedro Sánchez nos ha dicho que esos apoyos le han podido y que va a seguir.

¿Alguien se imagina a Macron, al que en Francia tildan de gay y dicen de su mujer, a la que llaman vieja, que se casó con el presidente galo por dinero, tomándose cinco días para ver si dimite o no dimite por los ataques a su familia? ¿Alguien se imagina que el ahora rey de Reino Unido, Carlos III, se hubiera tomado cinco días, anunciándolo a bombo y platillo, para reflexionar sobre su continuidad a la sucesión de la corona cuando todo el mundo hablaba de sus conversaciones íntimas con Camila y que le gustaría ser su Tampax? Pues bien, hay gente que cree que Pedro Sánchez, el autor del "Manual de resistencia", está tan enamorado de su esposa que no ha podido resistir la presión de que circule una carta de recomendación firmada por su mujer a favor de una empresa y que asociaciones de ultraderecha hayan presentado denuncias contra ella (porque Feijóo ni siquiera la quiso llevar al Senado para que diera explicaciones, mientras se difundían calumnias contra la propia esposa del gallego). Sin ir más lejos, hemos visto muchísima más presión en los medios, en las redes sociales, en la calle y en los juzgados contra Iglesias y Montero y contra el novio de Ayuso que contra la esposa de Pedro Sánchez.

Pero, hete aquí, que enseguida ha salido una encuesta del CIS, encargada al efecto, donde Tezanos da una intención de voto, tras la carta de Pedro Sánchez, al PSOE del 38,6% y deja al PP (que, recordemos, ganó las anteriores elecciones generales) con un 29,2%. Ya se ha anunciado que TVE (más progubernamental que nunca) hará una entrevista al presidente sobre sus tribulaciones y los de ERC ya han puesto el grito en el cielo, pues en Cataluña están en campaña electoral. Estoy esperando a ver si en la entrevista preguntan a Sánchez si va a reconocer, por fin, a Palestina como Estado y cuándo y por qué entregó la soberanía del Sáhara a Marruecos en contra de la ONU.

He visto la comparecencia de Sánchez en TV del lunes 29 (las imágenes son necesarias, porque la comunicación no verbal a veces hay analizarla y dice más que la verbal) pero luego he leído el discurso  (porque hay palabras o matices que, en un primer momento, se te escapan). Aunque Sánchez apareció como Pedro el Mártir en su día, con una modulación de voz que invitaba a dar pena y que seguro que emocionó a los incondicionales, algunas de sus afirmaciones, producen incertidumbre y hasta temor: Sánchez dijo que todo esto "no obedece a ningún cálculo político", que, "o decimos basta o esta degradación de la vida pública determinará nuestro futuro", "los bulos deliberados", "las víctimas de esas mentiras", "quieren relegar el papel de la mujer al ámbito doméstico", "un daño irreparable a nuestra democracia", "poner el foco en las víctimas, y no en los agresores", "confundir libertad de expresión con libertad de difamación", "mi compromiso es trabajar sin descanso, con firmeza y serenidad, por una regeneración pendiente", "solo hay una manera de revertir esta situación, que la mayoría social, como ha hecho estos cinco días, se movilice". Vamos a ver en qué se sustancia la "regeneración" y la "movilización social". De momento ya han salido voces en el PSOE atacando con más virulencia a los jueces y pidiendo que se eliminen las subvenciones, anuncios, etc, a los medios de comunicación que "difundan bulos y mentiras". Vamos a ver si tras todo este circo hay alguna intencionalidad política aviesa o todo ha sido por amor. 

   

viernes, 26 de abril de 2024

¿DIMITIRÁ SANCHEZ?

 


Las personas bien informadas tienen un problema: para la gente es más fácil creer las cosas sencillas, los relatos con pocas complicaciones y los cuentos chinos que no ponen en un brete, que las reflexiones basadas en datos, en precedentes históricos y en evidencias, pero que preocupan demasiado. Sí, es como lo que se dice que hace el avestruz con su cabeza cuando se siente amenazada. Y si esas cosas fáciles de entender se parecen a una fotonovela de Corín Tellado y a un programa del corazón de Sálvame, que a mi eso me pareció la carta de Sánchez, pues aún tragan más y mejor.

Hacer predicciones siempre es arriesgado, sobre todo cuando hay condicionantes que no dependen de ti. Es más fácil adivinar el pasado, así siempre aciertas. Por eso sería más fácil esperar a la decisión final de Sánchez, un hombre que nos ha acostumbrado a actuaciones impredecibles y hacer cosas inverosímiles para el común de los mortales, así podríamos hablar, ya sobre seguro, sobre la dimisión o no dimisión de Sánchez. Yo eso se lo voy a dejar a otros.

No me he creído la carta de Sánchez. El todavía presidente del Gobierno me engañó alguna vez, lo confieso, como supongo que a mucha gente, pero, ni una más. No me he creído esa carta lacrimógena, de cuatro folios, donde el que escribió el "Manual de Resistencia" nos cuenta lo mal que se siente por los ataques a su persona y a su familia. Tampoco creo que sea una reacción a que un juzgado ha abierto diligencias, que están muy lejos de ser sustanciadas, después de una denuncia del pseudosindicato de extrema derecha, Manos Limpias, que, por cierto, con su historial de extorsiones, las tiene muy sucias, contra Begoña Gómez, la esposa de Pedro Sánchez. Una denuncia basada en publicaciones de los periódicos, es decir, con muy pocas posibilidades de prosperar. No estoy diciendo que Sánchez no esté profundamente afectado (desde hace días la congoja se le ve en la cara y en la comunicación no verbal) lo que sospecho, y es algo más que una simple corazonada, es que ese sinvivir no es tanto por Begoña como por Pegasus, pues Francia ha remitido a la Audiencia Nacional sus pesquisas y averiguaciones y éste tribunal ha reabierto el caso del espionaje contra Sánchez. Aún peor, yo no descarto que EE UU, a instancias de Israel, y mediante intermediarios que, a falta de pruebas no voy a nombrar, haya ordenado a Sánchez dimitir, como sospecho también que le ordenaron entregar la soberanía del Sáhara a Marruecos. Sánchez ha enfadado mucho a los sionistas por sus declaraciones sobre el reconocimiento de Palestina como Estado y por su gira por varios países de Europa (con poco éxito) y de Oriente Medio para atraer a más países a su causa y erigirse en un líder internacional de prestigio. Craso error, parece que no conoce bien a esa gente. No sabemos lo que había en el móvil de Sánchez, de la ministra de Defensa, del ministro de Interior, etc (hay que ser muy poco profesionales para llevar datos comprometedores, secretos de Estado y vaya usted a saber qué cosas más, en el teléfono móvil) lo que sí sabemos es que todos ellos han sido espiados y todos esos datos recopilados por el programa israelí Pegasus y que los sionistas y sus padrinos, EE UU, tienen en su poder todos los detalles.

Si a la gente le dices que estamos ante un golpe de Estado no se lo creerá. Pero algunos ya hemos visto esta película, otro golpe de Estado con aristas similares. La vimos en enero (digo bien, en enero, no en febrero) de 1981, y algunos de aquellos actores fueron exactamente los mismos. Adolfo Suárez no quería reconocer el Estado de Israel. En política no hay casualidades, hay causalidades. Por supuesto, Sánchez no puede dimitir sin dar razones de peso que convenzan a la gente, empezando por los conspicuos y militantes de su propio partido, y no va a decir que lo tienen cogido por la entrepierna y porqué, necesita un relato, el relato bien estudiado de la carta. Todos estarán más proclives a creer, incluyendo, por supuesto, a los socios del gobierno y a la encantadora oposición, una fotonovela rosa y lacrimógena en la que solo falta la manifestación de adhesión en Ferraz  y un beso de la pareja en la despedida, a que España se encuentra ante el mayor ataque a su soberanía desde la Guerra de Independencia contra Napoleón.

lunes, 22 de abril de 2024

EL DESASTRE DE PODEMOS EN EL PAÍS VASCO

 


Las encuestas casi han clavado los resultados de las elecciones autonómicas en el País Vasco del pasado domingo 21 de abril. Los resultados son pésimos para el Estado y para los españoles, pero aún podrían haber sido peor si Bildu hubiera ganado al PNV, lo que no sucedió por muy poco. El PSOE podrá seguir apoyando al PNV para gobernar, pero la mayoría soberanista, independentista, separatista o llámela usted como quiera, ha crecido más que nunca. Ese "éxito", que se concreta en la espectacular subida de los exterroristas, se debe principalmente a que la pseudoizquierda, tanto el PSOE, como Podemos y Sumar, han colaborado con Bildu, coqueteado con ellos, les han dado el ayuntamiento de Pamplona y, en fin, han lavado la cara a los que se niegan a decir que ETA fue una banda terrorista. La pseudoizquierda no solo ha apoyado a nacionalistas, separatistas y golpistas en Galicia, en Valencia, en Baleares y en Cataluña, sublimándose, ha alimentado a los de Bildu en Navarra y en el País Vasco. Las consecuencias de la ausencia total de sentido de Estado de la pseudoizquierda serán muy graves para España en el medio plazo. Pero, en el corto plazo también las políticas irresponsables tienen consecuencias y las más claras de todas las vemos en Podemos. La formación morada que, recordemos, ganó las elecciones generales en Euskadi el domingo 26 de junio de 2016, ha desaparecido del Parlamento Vasco, como desapareció del Parlamento Gallego y como ha quedado reducida al "gallinero" en el Congreso de los Diputados, donde llegó a tener 70 escaños. Sumar, el heredero de Podemos, solo obtiene un diputado, lo mismo que Vox. Para esa pseudoizquierda desnortada que ha abrazado las políticas Woke, promocionado leyes estúpidas e inconstitucionales, apoyado todas las fechorías de Sánchez y coqueteado con separatistas y exterroristas es un desastre total, pero para Vox mantener su único diputado en "tierra hostil" es todo un éxito. Podemos ha sido incapaz de tener una política sería, incapaz de hacer la más mínima autocrítica e incapaz de rectificar tras cada batacazo electoral, pues bien, lo que le ha pasado en el País Vasco y su desaparición como formación política estaba y está cantado. Ellos, ellas y elles ya han hecho suficiente daño. Y si haces lo mismo, Yolanda Díaz, pues, lo mismo te pasará.

Debemos tener caro que las elecciones en el País Vasco no son totalmente democráticas, porque decenas de miles de familias han tenido que emigran a otras CC AA españolas durante los "años de plomo", tras amenazas y coacciones sufridas en las ciudades y pueblos de aquellas tierras. Así que ninguna formación política tiene allí autoridad moral para sacar pecho de nada y la que menos Bildu, que todavía tiene la pistola debajo de la almohada. No vamos a ver a nadie echando una lágrima por lo que ha pasado, eso solo lo harán las víctimas de ETA en la intimidad, otros estarán contentos, algunos indignados y muy pocos, entre los que me encuentro, muy, muy, indignados. 

miércoles, 17 de abril de 2024

EL ASCENSO DE BILDU

 


Todas las encuestas apuntan a un ascenso de Bildu en las elecciones que se van a celebrar el próximo domingo, 21 de abril en el País Vasco, pero, no solo eso, pronostican que los exterroristas ganarán los comicios. Ha cundido el pánico en la pseudoizquierda: en Podemos y Sumar, que han demostrado ser los más irresponsables de todos, el miedo no es porque pueda ganar Bildu, sino porque las distintas encuestas demoscópicas les dejan en cero, o en el mejor de los casos, solo con un diputado (Podemos tiene ahora seis) y después de lo que les ha pasado en todas partes, especialmente en Galicia, donde Las Mareas, de 14 escaños que llegaron a tener en el parlamento autonómico también se quedaron en cero y sus votos fueron a parar al BNG, su desaparición como partidos políticos estaría cantada, más aún si tenemos en cuenta que Yolanda Díaz, después de la rebelión de Los Comunes, ha caído en desgracia ante Sánchez. En el PSOE les tiemblan las canillas porque ahora empiezan a ser totalmente conscientes de las consecuencias de lo que han estado haciendo desde hace algunos años, lavar la cara a los que no han condenado los crímenes de ETA (más de 300 quedan aún por aclarar) y coquetear groseramente con Bildu, formación política que homenajea a los asesinos y cuyo candidato no ha sido capaz de llamar, ante las cámaras de TV, terrorista a ETA, la llamó "grupo armado". En fin, Aznar calificó a ETA de "Movimiento Vasco de Liberación" luego de que casi lo matan con una bomba. Después de dar a Bildu la alcaldía de Pamplona y de defender los acuerdos en Navarra y en el Estado con Bildu (las hemerotecas son inmisericordes) escuchar ahora, en plena campaña electoral, a los conspicuos y candidatos socialistas decir lo malos que son los de Otegui resulta patético. A la gente se le puede tomar mucho el pelo durante mucho tiempo, pero no se le puede tomar mucho el pelo todo el tiempo. En el PSOE ya hacen cábalas sobre lo que podría pasar si ganara Bildu las elecciones. Si gobiernan con los exterroristas y/o les facilitan la mayoría parlamentaria, malo, porque quedaría totalmente diáfano que los socialistas no tienen ningún tipo de escrúpulos, si apoyan al PNV para formar gobierno, como hasta ahora, peor, porque, después de ganar las elecciones, Bildu no podría pasar por eso y tendría que dejan de apoyar a Sánchez en Madrid. Sin embargo, hay un escenario aún más pésimo para los españoles, un gobierno de coalición de Bildu y el PNV, que representaría la "mayoría social" que algunos insensatos han logrado crear. Nacionalistas y exterroristas seguirían apoyando a Sánchez en el Congreso de los diputados, pero España estaría aún más cerca, de lo que lo está ya, de su disolución como Estado-Nación.

martes, 16 de abril de 2024

EL POLVORÍN DE ORIENTE MEDIO

 


"Si alguien cree que sabe lo que pasa en Oriente Medio es que no conoce Oriente Medio". La ocurrente frase invita a pasar por encima de las causas, como si toda la violencia, todos los muertos, en esa parte del mundo fueran también producto de una "maldición bíblica", que por allí hay mucha afición a ese tipo de relatos. Entablar, es este sentido, un debate cabal para ver quién tiene, o no, razón en ese multiconflicto es complicado. No puedes discutir con alguien que se cree a pies juntillas que las aguas del Mar Rojo se abrieron para que pasaran por allí Moisés y los suyos, que habían estado en Egipto, como esclavos haciendo pirámides, y que a los de Jericó les estuvo bien, porque Dios había dicho a los israelitas que aquella era su "tierra prometida", así que nada, a tocar los cuernos y que se derrumben las murallas para pasar a todos sus habitantes a cuchillo. En fin, yo tengo mi propia idea del asunto ¿Qué no le gusta? Lo siento, yo no escribo para agradar:

Oriente Medio (englobaremos también ahí a Oriente Próximo) está formado por países que tienen mucho de artificiales. Como en otras zonas del mundo, el Imperio Británico trazó fronteras como le vino en gana y eso tiene mucho que ver con los conflictos posteriores. En África hemos visto también como las potencias europeas trazaron fronteras a su conveniencia, repartiendo pueblos y etnias artificialmente, que, a la postre, provocaron cientos de miles de muertos. Si quiere un buen ejemplo, Ruanda, con los hutus y los tutsis. Pues bien, los restos del Imperio Británico y del Imperio Otomano, manejados imprudentemente y/o con aviesas intenciones, es un ingrediente no menor del polvorín. Otro ingrediente, del que hablaremos más adelante, es el tradicional y secular enfrentamiento entre sunitas y chiítas, las dos grandes ramas del Islam. Meter a todos los musulmanes en el mismo saco es como meter a católicos y protestantes en el mismo saco en plena Guerra de Flandes. Por si todo esto, de por sí, no dibujara ya un panorama más que complicado, tras la Segunda Guerra Mundial las potencias vencedoras quisieron quitarse a los judíos de encima y qué mejor que darles un país. La verdad es que esto ya se había estudiado antes, incluso se barajó Madagascar y otras tierras africanas para albergar a los judíos, cambiando, convenientemente, el relato bíblico, claro. Recordemos que entonces Palestina estaba ocupada por los británicos. Tras atentados terroristas sionistas, como el del Hotel Rey David, sede de la Comandancia Militar del Mandato Británico en Palestina, que produjo 92 muertos (22 de julio de 1946) y presiones de EE UU, los británicos salieron por pies y empezaron a llegar colonos judíos a Palestina de todas partes del mundo. Recordemos que en 1905 la población judía en Palestina era solo del 5%. Introducir un objeto extraño en un cuerpo a veces produce metástasis. Un reciente estudio sobre el genoma de los palestinos que, al contrario que los judíos, sí constituyen una etnia, arrojó que están relacionados con aquella tierra desde al menos 3.700 años. Ese estudio, naturalmente, no se puede hacer en Israel, porque los israelíes no constituyen una etnia, ni un pueblo propiamente dicho, se trata de una comunión de intereses unidos por el rasgo común de la religión. Ya puede ser usted esquimal que se pone un nombre hebreo, abraza el judaísmo, y ya puede ir a matar palestinos para robarles su tierra. Y los malos y los terroristas serán los palestinos si intentan defenderse de alguna manera del quinto ejército más poderoso de la Tierra y de los colonos armados que van acompañando a las excavadoras.

Desde el mismo momento de la independencia de los países árabes, y de la creación del Estado de Israel, Oriente medio se convirtió en un tablero más de la confrontación entre las grandes potencias, en el marco de la "Guerra fría". El petróleo, por supuesto, no es ajeno a ello. Las guerras que han acontecido allí o bien han sido por el enfrentamiento con Israel o por el petróleo ¿Verdad que sí vamos entendiendo? Tener a un gendarme en la zona armado hasta los dientes, bombas nucleares incluidas, es importante para las potencias occidentales, y apoyar a los demás es importante para las potencias orientales. Provocar la inestabilidad en la región con la estrategia del caos para usarla en tu beneficio (David Petraeus, general de cuatro estrellas que fue responsable del mando de EE UU para Oriente Medio y luego director de la CIA) es interesante, y si no es suficiente se interviene militarmente, como en las dos guerras de Irak. Pero ¿Qué pasa si el tipo más listo de la clase viene con otra estrategia, aprendida también en su larga experiencia en los servicios secretos y, como avisó a Erdogán de que le iban a dar un golpe de Estado, avisa a Bim Salmán de que lo mismo le iban hacer a él? Pues, pasa que las cinco se chocan ahora con otros, pasa lo impensable, que sunitas y chiítas se dan la mano y se abrazan (Hamás es sunita y Hezbolá chiíta) y pasa que Arabia Saudí, Irán, y otras potencias petroleras y gasísticas de la zona quieren ingresar en los BRICS. Israel, se convierte entonces en un instrumento muy poderoso para la desestabilización y los sionistas se aprovechan de ello en su propio interés. Que tengan cuidado EE UU y sus aliados, que creen que controlan a los nazis y a los sionistas igual que controlaban a Al Qaeda. Tuvieron un 11S y otros atentados y no deberían descartar un ataque ucraniano (de hecho ya ha habido varios) a la mayor central atomoeléctrica de Europa y/o un ataque con armas nucleares tácticas de Israel a Irán. Mientras estas cosas pasan, y desvían la atención, Israel sigue masacrando palestinos en la Franja de Gaza, hombres, mujeres y niños. Ya nadie duda que los sionistas quieren matarlos a todos, con bombas o de hambre, o que se vayan a Europa como refugiados. Ursula von der Layen ya ha ido a Egipto a dar miles de millones a al Sisi para que los mantenga allí, como se hizo en Turquía con los refugiados sirios ¿Verdad que aquello no salió bien del todo? Los ministros de exteriores de la UE se reúnen para poner más sanciones a Irán (ni una sola han puesto a Israel por atacar la legación iraní en Damasco, ni por masacrar a los palestinos de Gaza) y los ciudadanos cada vez se fían menos de los impresentables que los gobiernan y se creen menos las mentiras que les cuentan. Nuestros ojos ven muchos muertos y lo peor se convierte en algo más que una corazonada. 

lunes, 1 de abril de 2024

EL "GOBIERNO SEMÁFORO" LEGALIZA EL CANNABIS

 La coalición de socialdemócratas, liberales y verdes que gobierna en Alemania ha legalizado el tráfico, venta y consumo de cannabis, también conocido como marihuana o simplemente "maría", eso sí, con algunas restricciones para impedir, solo sobre el papel, naturalmente, que los más jóvenes se enganchen a los porros. Ante esta Europa que se cae a pedazos, donde los políticos hacen cosas de locos y mienten más que hablan para justificarlas, necesitaban imperiosamente el Soma del que ya nos hablaba Aldoux Huxley en su famosa, genial y premonitoria novela "Un mundo feliz", ya que la TV, con sus programas basura, el fútbol y los móviles parecen no ser suficientes para la alienación de los ciudadanos. Si no fuera porque ya hemos visto como los verdes alemanes y la ministra de Exteriores que tienen en el gobierno germano ("Sra. cremitas", ya llaman, por todo lo que se ha gastado de dinero público en potingues y en peluquerías) se han convertido en los más belicosos de Alemania, nos llamaría mucho la atención que también sean a los que más les gustan que la población tenga acceso a las drogas, pero, seamos serios, aunque la derecha decía hace unos años que los verdes alemanes eran como las sandías, verdes por fuera y rojos por dentro, algunos ya sospechábamos que, en verdad, eran como los melones piel de sapo, verdes por fuera y amarillos por dentro.

La legalización del cannabis en Alemania dará un nuevo impulso para que la pseudoizquierda española haga lo mismo en nuestro país, aunque yo estoy casi seguro que eso ya se contemplaba en los acuerdos entre Sumar, donde ahora está Errejón, y el PSOE. Va a ser muy gracioso ver como la ministra de sanidad, Mónica García, nos cuenta lo necesarias que son las nuevas restricciones al consumo de tabaco al mismo tiempo que nos dice lo que molan los porros.

Holanda fue pionera en la fechoría, pero hoy la situación en Holanda es ésta: Pieter Tops es académico de la Universidad de Tilburg y profesor de la Escuela de Policía Holandesa, pero ahora se dedica a investigar cómo el crimen organizado opera abiertamente en ese país y cómo ha ido ganando aceptación en ciertos sectores de la sociedad. "Creímos que dábamos un ejemplo al mundo… estuvimos muy satisfechos de ello por mucho tiempo, ahora ya no”. "Esto es consecuencia de las políticas públicas sobre el consumo de drogas instaurada en Holanda a finales de los años setenta". dijo Tops en una conferencia. "Tráfico de drogas, el ejemplo holandés". "Lo que advertí hace cinco años en otra conferencia en Ámsterdam, se convirtió en una terrible realidad de la que se habla poco, pero de la que se puede aprender mucho: el narco puede permearlo todo, si se le deja espacio". "Holanda, además, se ha convertido en un espacio legal para que operen las mafias y en uno de los principales productores de drogas sintéticas del mundo". "Organizamos, ingenuamente, la venta legalizada en los famosos "coffee shops”, que de uno u otro modo se han convertido en centros de atracción turística. En Ámsterdam hay cerca de 160 donde se vende cannabis”, aseguró Tops.  Explicó que "la proliferación del consumo en Holanda tiene un vicio de origen, la legalización, que ha tenido graves consecuencias a lo largo de los más de treinta años que lleva en vigor".