miércoles, 31 de mayo de 2023

UNA SERIE QUE YA HEMOS VISTO

 


Sigue la pseudoizquierda, erre que erre, empeñada en suicidarse, ni una sola autocrítica les he escuchado tras el batacazo electoral del 28M. Los culpables de su debacle otra vez son los ciudadanos, “que no saben muy bien lo que les conviene”, los que se han “equivocado al votar” o los que se “han quedado en casa”, que han sido 543.409 españoles más que en las elecciones anteriores. Yo he sido uno de los que se han abstenido, lo confieso, por primera vez en mi vida, después de mucho reflexionar, no un solo día, sino durante meses. Alguno dice que cuando dentro de un tiempo los que han ganado hagan cosas que no nos gustan, “ajo y agua”; qué ingenuos, yo al menos conozco perfectamente el gallinero, pero de alguna manera tenía que vengarme y no podía ser votando a la derecha o a la extrema derecha ¿Entendido?

Pedro Sánchez nos ha metido ahora en otra campaña electoral, bueno, aunque no nos hubiera metido de lleno no habríamos salido de ella. Estar en campaña electoral permanentemente es el gran inconveniente de la democracia. Tendremos elecciones generales el 23J, en pleno verano y con un montón de gente de vacaciones. Vendrán más turistas a España que nunca; este año, además de playa y toros, tendrán también circo. Yo no sé si este será un “verano azul”, lo que tengo clarísimo es que, en ningún caso, va a ser un verano rojo, la agenda 2030 y las cosas que hace Sánchez y sus ministras y ministros tienen muy poco de rojas. Incluso tendremos un “Chanquete” por el que llorará medie España, queda por saber si será Sánchez o Feijóo, yo no daría por “muerto” al actual presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, he visto cosas sorprendentes a lo largo de su carrera política.

Estos días los de Yolanda Díaz y los de Podemos han tenido que dejar de lado las navajas traperas, se trata de sobrevivir, poca broma. Sánchez les ha obligado a dar pasos en pocas horas que no han dado durante meses. Habrá codazos por colocarse en puestos de salida de las listas, que presumen, con razón, van a ser muy pocos. En fin, otros/tras están ya buscando trabajo y, acostumbrados/das a cargos y sueldos que no habrían soñado, se rebanan ahora los sesos para ver cómo van a pagar los pufos. Cuando te empecinas, elección tras elección, en el error, te pasan esas cosas. Los socialistas tienen que cerrar filas también, no les queda otra, y tienen que hacerlo tras las ocurrencias de Sánchez, o se salvan con él o se suicidan con él. En muchos ayuntamientos y en unas cuantas CC AA ya se han suicidado, pero, seamos justos, no solo por culpa del presidente del Gobierno, han colaborado con él mucho y bien.

Como no son capaces de rectificar en nada, la estrategia está clara, amenazar a los votantes, y, sobre todo, a los que, como yo, no hemos votado, con la entrada en el Gobierno de Vox. Eso, queridos, no os va a funcionar. Una buena parte de los ciudadanos votará en otra clave y algunos, como millones de inmigrantes, asunto nada baladí, no podrán votar, así que todo será distinto. Veremos pedalear alegres en su bicicleta a Pancho, Tito, Javi, Quique, Piraña, Julia, Bea y Desi, mientras sonará de fondo la música pegadiza. Es un nuevo “verano azul” que todos sabemos muy bien como acaba, el suspense está en conocer la serie que nos pondrán en otoño, seguramente será dramática o de miedo, como fue "Historias para no dormir".

 

 

lunes, 29 de mayo de 2023

DESCALABRO DE LA IZQUIERDA

 


“Cuando alguien está empeñado en suicidarse no puedes hacer nada”. No está muy claro quién inventó esta frase, pero la primera vez que la escuché fue a Putin respondiendo a una pregunta telefónica de una niña. Es una frase maravillosa que describe, como ninguna otra, a los que no fueron capaces de hacer la más mínima autocrítica, a pesar de que llevaban ya siete batacazos electorales seguidos. Les dijimos que si no rectificaban esto les pasaría, y como no han rectificado esto les ha pasado. De cajón.

No es sencillo hacer un análisis en conjunto de lo que ha sucedido, porque en las elecciones autonómicas y municipales cada municipio y cada C A es un mundo y no se puede caer en un totum revolutum, no sería riguroso. Pero, por encima de las singularidades hay cosas evidentes: El PP sube, el PSOE resiste muy mal, Vox crece y Podemos casi desaparece. Cuando vemos los territorios donde ahora va a gobernar el PP en vez del PSOE parecería que los socialistas son los que han sufrido una debacle, pero la debacle es del conjunto de la izquierda, muy especialmente de Podemos y sus franquicias, que apoyaban al PSOE en los gobiernos de muchos sitios. Como ejemplo pongamos a la C A de Valencia.

La pasada noche, cuando veía en el balcón de Génova 13 a Feijóo, Ayuso y Almeida, me preguntaba cómo era posible que esta gente, con este nivel, hubiera arrasado en las elecciones, pues bien, vayamos a unos números de los que la izquierda derrotada está huyendo como del aceite hirviendo, sí, esa izquierda que tampoco ahora tiene la más mínima intención de hacer autocrítica y rectificar y que tiene tanta afición al suicidio: En estas elecciones ha habido 543.409 abstenciones más, 307.219 votos en blanco más y 335.989 votos nulos más que en las de 2019, es decir, estamos hablando de nada menos que de 1.186.617 votos, bastantes más de los que el PP ha sacado al PSOE. Que la abstención de muchos votantes de izquierda era un peligro para los que han estado haciendo cosas que han enfadado mucho a sus propios votantes era evidente para quién quisiera verlo y teníamos el ejemplo de lo que sucedió en las últimas elecciones en Italia, con un 7% más de abstención ¿Por qué muchos votantes de izquierda han vuelto la espalda a sus partidos? No hay una única razón ni las razones son las mismas en los votantes del PSOE que en los de Podemos. En el electorado socialista yo creo que ha influido más la eficaz labor de desprestigio y de desgaste de Sánchez (no sin fundamento) en algunos medios y en las redes sociales por parte del PP y de Vox, pero en Unidas Podemos, mucho más ideologizados, han sido claramente sus errores políticos: leyes de género y trans, posición pro-OTAN en la guerra de Ucrania, ser pusilánimes ante lo que hizo Sánchez con el Sáhara, abrazar la agenda 2030, etc, mucha gente no ha tragado con ese tipo de cosas y, al contrario que muchos votantes socialistas, los de UP no votan a la derecha en casi ningún caso, se quedan en casa, votan en blanco o meten una papeleta con un piropo. La irresponsabilidad de las mujeres que dirigen Podemos (muy mayoritarias en los puestos de dirección) y de los que se unieron a su fiesta, a sus chorradas, va mucho más allá de su descalabro y desaparición, como había sucedido en Galicia, donde Las Mareas ya había desaparecido después de llegar a tener 14 diputados autonómicos, su debacle en el País Vasco y Navarra ha reforzado a Bildu y en Cataluña a los independentistas de derechas.

Sería de estúpidos pedir peras al olmo, así que cada cual haga lo que estime conveniente. Los españoles así lo han hecho, unos de una manera y otros de otra, y que salga el Sol por Antequera, nos hemos dicho. La venganza es un plato que se toma frío y hemos tenido meses para pensar cómo vengarnos.

 

miércoles, 24 de mayo de 2023

LA DEMOCRACIA, DEVALUADA.

 


Nos habían dicho que la democracia era el sistema político menos malo, y posiblemente fuera verdad, el problema es cuando nos quieren hacer ver como democracia algo que cada vez se le parece menos y cuando los ciudadanos asistimos, como meros espectadores manipulables, al juego trilero de los políticos que se llaman a sí mismo demócratas. Sin duda uno de los procesos más antidemocráticos que hemos vividos en los últimos años en el Viejo Continente, que, por cierto, tiene de viejo lo mismo que los demás, ha sido la llamada Integración Europea, esa Europa de los Ciudadanos que se ha convertido en una quimera, en un timo y en una patraña. Tras el fiasco de la Constitución europea, que unos aprobamos y otros no, pero que fracasó, no por eso se detuvo el “proceso de integración”, eso sí, ya sin ninguna consulta a los ciudadanos, no fueran a decir que había cosas con las que no estaban de acuerdo. Así se ha llegado a un punto donde una camarilla de tecnócratas corruptos (como estamos viendo, por ejemplo, con el escándalo de los contratos de las vacunas) hacen y deshacen a su antojo, fiscalizados, en teoría, por los europarlamentarios de Estrasburgo, pero solo sobre el papel, porque en la práctica hemos visto como muchos de ellos estaban comprados por Qatar y por Marruecos y nada ni nadie nos garantiza que no estén comprados también por otros países o por otros poderes. Por cierto, todos los cogidos con las manos en la masa, quiero decir, en la pasta gansa, ya están en libertad. Es esa gentuza la que se organiza para comprar armas y municiones y para azuzar guerras como fue la de Libia o es ahora la de Ucrania, para participar en la primera, eso sí, se pidió permiso a los parlamentos nacionales; para participar, de facto, en la segunda, donde todos nos jugamos la vida, ni se ha consultado a los parlamentos nacionales ni directamente a los ciudadanos de la Unión. A muchos esta devaluación evidente de la democracia les dará igual o hasta la aplauden, pero claro, todo se contagia. El contagio lo estamos viendo diáfano en la campaña electoral española, una campaña larguísima donde no hay claves de elecciones municipales y autonómicas y de elecciones generales, todo se confunde y todo se juega en el mismo tablero. No hay cosa más grosera en la devaluación de la democracia que la compra de votos, evidentemente. Los votos se pueden comprar de una forma legal, aunque poco ética, como es repartiendo dinero gentilmente de los impuestos de los ciudadanos a través de los Presupuestos Generales del Estado o de “partidas extraordinarias” a algunos colectivos muy concretos y/o destinando ese dinero también a “trenes gratis”, cines a “solo dos euros”, “videojuegos gratis”, etc, etc, en fin, todas esas cosas que a usted le sonarán mucho y que son propias de gente con poco vergüenza y pocos escrúpulos, pero muy espléndida con el dinero de los demás. Pero, los votos también se pueden comprar de forma ilegal, “tú me das tu voto y yo te doy 150 euros”, no es exactamente lo mismo que de la otra forma, pero se le da un aire. Eso estamos viendo ya de forma masiva en Melilla y en algunos pueblos de la Península, como en Mojácar (Almería). La corrupción en España ni de lejos se ha erradicado, ni, por supuesto, era exclusiva del PP, como estamos viendo ahora. Unos fueron dopados a las elecciones y otros quieren ir con sobredosis. Sin embargo, aunque las dos formas de comprar votos que hemos señalado son las más llamativas, no son las más importantes, no son, al menos de momento, las que pueden decidir unas elecciones a nivel regional o nacional; aquí entra lo que yo he llamado el “voto foráneo”, para aglutinar con un vocablo votos de extrañas o singulares procedencias, me refiero, por ejemplo, al voto de gentes que son españoles pero que dicen que su país es Marruecos y a nietos y biznietos de emigrantes españoles que residen en el extranjero y que no han pisado nunca España. Estamos hablando de millones. Pues bien, así es como se devalúa la democracia, en España y en Europa, y así es como algunos se aprovechan de su devaluación.

domingo, 14 de mayo de 2023

LA VISITA DE SÁNCHEZ A WASHINGTON

 


Aunque muchos españoles no se enteraron del episodio, los periódicos y los telediarios dieron muy poca publicidad al asunto, yo aún recuerdo la visita de Rajoy a los EE UU en enero de 2014 y en concreto una afrenta que los americanos no se atreverían a hacer a ningún presidente de ningún país del mundo, salvo a España y alguna república bananera: Rajoy llevaba unos caros facsímiles de obras de hace 500 años y cuando se las entregó a Obama, éste, que no tenía nada para corresponder, le entregó a cambio una cajita de caramelos M&M´s, con la bandera USA, que tenía encima de la mesa del despacho oval. Aquel día pensé que era imposible caer más bajo como representante de un país, y sentí vergüenza ajena por Rajoy y vergüenza como español, pero es que aún me faltaban por ver otras visitas a la capital y a la sede política del Imperio. La visita de Sánchez a Washington ha marcado el límite de la pleitesía y del vasallaje, aún se podía caer mucho más bajo que Rajoy a aún se podía ciscar más el propio presidente de España en su país. Antes de reunirse con Biden, Pedro Sánchez ya había condecorado Nancy Pelosi con la orden de Isabel la Católica, mientras elogiaba, babosamente, a la expresidenta de la Cámara de Representantes, glosando sus acciones “en defensa de la democracia”, que incluyen, por supuesto, su viaje a Taiwán, un país no reconocido por la ONU, para meter el dedo en el ojo a China. Pero ¿No hemos visto todos en el asunto del Sáhara Occidental el respeto por la ONU que tiene Pedro Sánchez? “Es usted un gran hombre”, “el mundo necesita un presidente como usted", "siga así, lo está haciendo bien”, en fin, este tipo de frases dirigió Sánchez a Biden mientras las aceitunas negras españolas, por poner solo un ejemplo, seguirán sin poder entrar en EE UU (lo que hay que hacer para ser secretario general de la OTAN). Nada consiguió Sánchez para España en su visita a EE UU, pero ¿Qué le dio él a USA? Escuchemos al secretario de Estado, Blinken: “Estamos muy agradecidos a España por la ayuda a Ucrania y al liderazgo internacional de Sánchez en ese conflicto, con la acogida de 173.000 refugiados ucranianos y el envío de armas”. Y Biden después remachó: “Agradezco al presidente Sánchez el acuerdo para acoger en España migrantes latinos” (Sánchez no quiso concretar el número). Sánchez también confirmó la autorización de otros dos destructores más de EE UU, con el sistema AEGIS, componentes esenciales del sistema antimisiles, en la base de Rota, Cádiz, (Zapatero ya había autorizado el despliegue de cuatro de esos destructores americanos en Rota) así como la imprescindible ampliación de la base para poder acoger a tanto buque, que, por supuesto, pagará España. Mientras esas cosas sucedían, la encantadora oposición del PP no hacía ni una sola crítica, porque, como hemos visto al principio de este escrito, tanto el PP como el PSOE pugnan desde hace mucho tiempo por ver quién de ellos lame más y mejor el culo a EE UU. Pero, curiosamente, tampoco hemos escuchado una sola crítica de los socios de Sánchez en su Gobierno, ni de los de la "mayoría progresista"; ni de los independentistas catalanes, ni de los comunistas de mentirijillas, ni de ellas, ellos y elles, ni siquiera de esos “marxistas-leninistas” que llevan en sus listas electorales a 40 condenados de ETA. Cuando en 1957 Franco entregó cuatro bases militares a EE UU al menos obtuvo la defensa imperial de su dictadura y unas cuantas toneladas de leche en polvo caducada, pero, eso sí, ni entonces, ni ahora Sánchez, han conseguido que los americanos limpien las arenas de Palomares, donde Fraga se bañó con el embajador americano, de los residuos radiactivos del plutonio de las cuatro bombas atómicas que cayeron de un bombardero estratégico B-52 ¿Sabe usted a dónde los he mandado a todos ellos?  

viernes, 12 de mayo de 2023

LA CONSPIRACIÓN DE LOS CHEMTRAILS

 


Siempre ha habido gente dispuesta a creerse cosas, personas que, sin prueba alguna y llevadas por sus deseos, por corazonadas, o por la fe, aseguraban por, ejemplo, que las aguas del Mar Rojo se abrieron para que pasaran por allí Moisés y los suyos. Si usted pensaba que llegado el siglo XXI, y con tanta información como la que disponemos ahora, eso habría ido a menos, quizá se equivocaba. Todos hemos visto como, por ejemplo, en plena pandemia, gente con carreras universitarias e incluso periodistas y escritores nos contaban desde algunos periódicos y desde alguna cadena de televisión que el Covid era una conspiración de los comunistas chinos, el financiero, Soros, el globalista, Gates, y unas cuantas entidades heterogéneas más, en santa alianza, para inocularnos un nanoagente con las vacunas y controlarnos a todos con el 5G. Algunos lo repetían continuamente, utilizándolo como instrumento político a falta de mejores argumentos, aunque eran los primeros que no se lo creían, pero hubo mucha gente que se lo creyó a pies juntillas y no se vacunaron, aunque veían caer a la gente como moscas a su alrededor. Hubo hasta quien perdió la vida por… bueno califíquelo usted. Pero, ni mucho menos esta fue la única conspiración ridícula a la que hemos asistido en los últimos tiempos, a mí me sigue haciendo mucha gracia la patraña de los OVNI (que se desempolva de vez en cuando), no como objetos volantes no identificados, que entra dentro de lo natural, sino del sentido que muchos le han dado, es decir, de platillos volantes que andan por ahí en noches oscuras, aterrizando en merenderos cerrados y abandonados (antigua serie “Los invasores”) de donde salen tipos con el meñique tieso u hombrecillos grises, con aviesas intenciones, abduciendo a los incautos. Los defensores de los llamados “antiguos astronautas” dicen embustes tan ridículos como que fueron los extraterrestres los que construyeron las pirámides de Egipto, para enfado del director del Museo de el Cairo. Algunos de estos cuentos chinos los sacan incluso los gobiernos, de vez en cuando, para despistar al personal de asuntos verdaderamente importantes. Pero, la idiotez siempre puede ir un paso más allá, y cuando podemos vez la Tierra en magníficas fotos y vídeos desde la Estación Espacial Internacional y podemos ver con un telescopio casero que no hay ni un solo planeta, ni una sola Luna, ni una sola estrella en todo el Universo visible que no sean esféricos/as, hay ahora una pléyade de conspiracionistas que dicen que nos engañan, que en verdad la Tierra es plana, llevando la contraria a la evidencia, a toda la comunidad científica, a Anaximandro de Samos (Grecia, siglo VI antes de Cristo) y a uno de nuestros héroes, Juan Sebastián Elcano (“Primus circumdedisti me”). No contentos con todas esas gilipolleces, salen ahora también con lo que han dado en llamar “chemtrails” (en español, estelas químicas) y de ellos se ocupan ampliamente en las reses sociales, en algunos periódicos y en algún programa de televisión. Se trata, al parecer, que esas estelas que dejan los aviones, y que todos sabemos que se deben a la condensación, en realidad forman parte de un plan diabólico para regarnos con productos químicos e impedir que llueva. El asunto no hay por dónde cogerlo, porque, son aviones de líneas comerciales los que dicen que hacen esas cosas y tendrían que estar implicados cientos de pilotos y muchos operarios en tierra, y mantener todos ellos el secreto. Por supuesto que nadie ha presentado ni una sola prueba de esas conspiraciones, ni ha ido con ella al juzgado a denunciarlas, solo hay fotos que cada cual puede interpretar a su antojo. Todas estas modas ridículas, como otras que nos están afectando gravemente, vienen de EE UU. En concreto la patraña de los “chemtrails” empezó allí hace decenios, no mucho tiempo después de que, en plena Guerra de Vietnam, desde aviones Hércules C-130, se fumigaran selvas y arrozales con el tristemente conocido “agente naranja) un defoliante que causó miles de muertos entre los vietnamitas y malformaciones atroces en los recién nacidos, sin contar con el desastre medioambiental logrado. De eso los conspiracionistas no dijeron ni mu.

jueves, 11 de mayo de 2023

ABORTO ¿UN DERECHO DE LA MUJER?

 


El Tribunal Constitucional ha avalado, por siete votos contra cuatro, la ley del aborto de 2010, que consagra el derecho de la mujer a interrumpir el embarazo en las primeras 14 semanas de gestación si necesidad de cumplir ningún requisito. La actual ley del aborto también autoriza el aborto hasta nada menos que 22 semanas (cinco meses) en casos como “peligro para la salud física o psíquica” de la madre, un coladero con un gigantesco fraude de ley que ya existía en la ley de tres supuestos de Felipe González. La gente debe saber que hay casos de bebés que salieron adelante con solo 22 semanas de gestación y, sin ir más lejos, Pablo Casado tiene un hijo tras solo 25 semanas de embarazo de su esposa.

La hipocresía sobre el aborto es monumental, ni se trata de un asunto que concierne solo a la mujer, ni estar a favor o en contra, aunque sea con matices, depende de una determinada ideología política, ni siquiera ser católico, o no, es un condicionante para estar a favor o en contra de la interrupción de embarazo, porque una cosa es lo que se dice y otra muy distinta lo que se hace. Si para muestra basta un botón, debemos recordar que el recurso del PP que ahora ha discutido el Tribunal Constitucional lo presentó el principal partido de la actual oposición, que también lo era entonces, hace nada menos que 13 años, y no se discutió en el alto tribunal hasta ahora, hasta que hubo una mayoría “progresista”. Seguramente la mayoría “conservadora” no tuvo tiempo en esos 13 años. Eso sí, fue la mayoría socialista en el Congreso de los Diputados la que aprobó la primera ley del aborto en España, la de los tres supuestos, de Felipe González, que hemos mencionado, y también la que enmendó la plana a esa misma ley, introduciendo la actual ley de plazos, ésta fue obra de la ministra de Igualdad, en el Gobierno de Zapatero, Bibiana Aído, que, por cierto, entró muy joven en política y a sus ubres sigue enganchada como representante de la ONU Mujeres en Ecuador y después en la ONU mujeres en Colombia. Debemos recordar también que la ONU ha excluido a los no nacidos del derecho a la vida. Y es que de eso se trata, contemplar la interrupción voluntaria del embazado, pagada, además, por todos los contribuyentes, estén de acuerdo, o no, con ella como un derecho de la mujer, soslayando el derecho superior a la vida que contempla el artículo 15 de nuestra Constitución.

Para ser un tipo de izquierda y ateo y posicionarse en contra de esta ley y en contra de que el aborto sea un derecho de la mujer hay que ser un valiente, pero hay que ser una auténtica heroína para ser mujer y también estar en contra. Algunos habían acuñado el término “feminazí” para calificar al nuevo totalitarismo feminista, pero ese totalitarismo llama ahora “machinazis” a esas heroínas (que tienen todo mi reconocimiento) que no están de acuerdo con que el aborto, por ejemplo, sea un método anticonceptivo más, sin límites éticos ni morales. Si hace quince años nos dicen que se podrían abortar fetos con cinco meses no nos lo hubiéramos creído, pero en los EE UU, de donde han venido muchas de las modas que ha abrazado el feminismo radical, ya hay Estados donde se puede abortar hasta con nueve meses de embarazo y ya hay grupos que dicen, sin cortarse un pelo, que incluso habría que barajar la posibilidad de que fuera legal "suprimir" a los recién nacidos en los primeros 12 meses de vida ¿Verdad que parece una locura? Pues, no me lo estoy inventando. También dicen que en el mundo somos demasiados y quieren "disminuir" una gran parte de la población, y tampoco me lo estoy inventando. Ni mucho menos soy el único que ha debatido sobre el asunto del aborto estos días, pero no he escuchado a nadie hablar, no solo de los derechos del no nacido, también de los derechos del padre. El derecho de la mujer a abortar libremente lamina el derecho del progenitor masculino a opinar siquiera sobre la vida de su hijo, pero si la mujer decide seguir adelante con el embarazo, entonces el padre tiene todas las obligaciones del mundo como padre. Lo de “nosotras parimos, nosotras decidimos” había gente que no lo había entendido bien.

 

EE UU A PUNTO DE SUSPENDER PAGOS

 


Un Estado puede quebrar lo mismo que puede quebrar la economía de una familia, aunque los Estados se han preocupado a lo largo de la Historia de dotarse de las medidas necesarias para que eso no se dé, o, al menos, para que eso no se vea o no sea totalmente explícito. Son muchos los países occidentales que están endeudados hasta las cejas, el más endeudado de todos, en relación con su Producto Interior Bruto, es Japón, pero el más endeudado en cantidad monetaria es, con mucho, EE UU, que en enero de este año ya había sobrepasado el techo de Deuda Pública autorizado por el Congreso, que era de 31,381 billones de dólares. Si la cifra le parece de tamaño sideral, la real, pues hay partidas autorizadas a no ser computadas como gasto, y, por tanto, de forma manipulada, no engordan ni el déficit ni la Deuda, puede ser bastante superior. Algunos expertos estiman que la Deuda Pública real de los EE UU podría estar en torno a los 36 billones de dólares. En EE UU, el nivel de Deuda Pública lo establece, mediante tope, la Cámara de Representantes, esto es así desde principios del siglo XX. Hay países, como Polonia, donde la Deuda se topa de otra manera, por ejemplo, con un tanto por ciento sobre el PIB, que en su caso es del 60%. En otros muchos, como España, no existe ningún control o, para ser rigurosos, los únicos controles que existen son los del mercado y Bruselas, el primero inmisericorde, el segundo muy flexible según interese. A pesar de que la Deuda Pública de EE UU no ha hecho más que crecer, el Presupuesto Federal, año tras, año, también ha crecido muy imprudentemente y, lo peor, aún ha crecido más el déficit. Veamos: si en 2022 el presupuesto USA fue de 5,8 billones de dólares, con un déficit de 948.100 millones de dólares y en 2023 el presupuesto es de 6,2 billones de dólares y se preveía bajar el déficit un 4,5%, la realidad es que la administración Biden ha elevado el gasto muy por encima de lo presupuestado, a pesar de que, merced a la inflación, también ha tenido bastantes más ingresos. En concreto, el gasto se ha disparado en Defensa y en las partidas milmillonarias de ayudas a Ucrania en la guerra que Occidente mantiene contra Rusia, hasta sobrepasar, como hemos dicho, el techo de Deuda. Ahora EE UU está ante la disyuntiva de gastar menos, lo que no va a hacer, o recaudar más vía impuestos, algo que ha prometido Biden, pero que está por ver. De hecho, el presidente de los EE UU ya ha presentado unos presupuestos para 2024 de 6,9 billones de dólares con un déficit de 1,9 billones. De locos.

Ni demócratas ni republicanos quieren que el país entre en suspensión de pagos, eso sería tremendo, no solo de cara a sus propios ciudadanos, también de cara al exterior, porque con ello se derrumbaría el dólar y la confianza en la primera economía del mundo. También sería una baza enorme para Rusia y China, países que no tienen problemas de Deuda Pública y que están prestos a sustituir la unilateralidad de EE UU por la nueva multilateralidad, donde países de economías emergentes, como India, Brasil, etc, podrían tener mucho que decir. Los republicanos, por tanto, no van a ser reticentes a aumentar todavía más el tope de Deuda, pero exigirán a los demócratas un recorte de los gastos y del déficit y que no haya más subidas de impuestos. Es decir, Biden tendría que hacer la política del Partido Republicado, repartir menos dinero gentilmente y, por tanto, perder las elecciones de 2024. Yo creo que no será así, Biden recurrirá a la Reserva Federal (aunque en teoría es un órgano independiente) para que esta le dé otra vez a la máquina de hacer billetes, y con ese dinero fiat, sin respaldo de valor, amortizar Deuda mediante la compra masiva de unos bonos que nadie cabal, lógicamente, querrá comprar. Una política hacía el abismo que impedirá controlar la inflación y que aumentará la insolvencia de EE UU y de todos los que están apalancados con el dólar. En fin, seguramente Biden y Sánchez coincidirán también en su gusto por el suicidio, no el personal, naturalmente, el de su país.

miércoles, 10 de mayo de 2023

¿FUE REALMENTE DERROTADO EL NAZISMO?

 


Lo que hemos visto este nueve de mayo, día que Rusia y las repúblicas exsoviéticas (por supuesto, no Ucrania) celebran la victoria contra la Alemania nazi, deja bien a las claras, para el que quiera verlo, que si bien los nazis fueron derrotados en el Este de Europa no está nada claro que también lo hayan sido en el Oeste. Salvando las distancias, a mí esto se me parece mucho al proceso de ETA ¿Fue realmente derrotada ETA? Los nazis en la UE están en las instituciones, lo mismo que Bildu está en el Congreso de los Diputados y aunque no maten siguen pensando igual. Lo paradójico de los nazis que están en algunos gobiernos y en las instituciones europeas es que no pertenecen tanto a partidos de ultraderecha o neofascistas como a otros que van de liberales, de socialistas y hasta de comunistas, pero cuyas acciones o inacciones son de un apoyo total a los nazis, bien explícito o tácito. La cuestión que analizamos no es, ni mucho menos, nueva: Poco antes de finalizar la Segunda Guerra Mundial el que para muchos es un ejemplo de estadista democrático, que ya tenía a sus espaldas la muerte de medio millón de soldados británicos en la Batalla de Los Dardanelos (Turquía) en la Primera Guerra Mundial, me estoy refiriendo a Winston Churchill, ya propuso a sus aliados americanos atacar a la URSS, que había perdido 27 millones de personas a manos de los nazis alemanes y sus aliados fascistas. El proyecto criminal de Churchill no siguió adelante, no sabremos nunca si porque los estadounidenses lo vieron demasiado malvado (entonces los americanos llamaban a Stalin el tío Josep) o porque temieron perder también ellos contra la URSS, a pesar de que ya tenían casi a punto la bomba atómica. Hubo una partición de Europa entre las potencias vencedoras, pero mientras que en el Este el reparto terminó tras la desintegración de la URSS, en el Oeste sigue vigente, pues aquí no se mueve nada sin que lo autorice EE UU, como todos sabemos y hemos visto, diáfano, en la guerra en Ucrania. En el Este los nazis fueron apartados de gobiernos e instituciones, no sucedió lo mismo en el Oeste donde generales nazis tuvieron altos cargos en la OTAN y científicos nazis desarrollaron misiles intercontinentales portadores de cabezas nucleares, con cinco de cuyos motores (del ICBM Titán) construyeron el Saturno V, el cohete que llevaría al hombre a la Luna. Ahora vemos que estaban en todas partes. La UE y su Comisión, el ente no democrático que gobierna Europa, ha decidido que no se debe celebrar la victoria sobre los nazis, al tiempo que en muchos de los países de la Unión se derriban los monumentos erigidos en memoria de los soldados caídos, cientos de miles, en su liberación del nazismo y en la liberación de la mayor parte de los campos de exterminio nazis. En Ucrania, han sustituido el Día de la Victoria por el Día de Europa. Si no fuera una ignominia, la cosa tendría algo de gracia, porque Rusia, sin contar Siberia, es el país más grande y poblado de Europa y porque Ucrania formaba parte de la URSS que derrotó a la Alemania nazi, eso sí, a los ciudadanos de la parte occidental de Ucrania les gustaban más los nazis Bandera y Hitler y masacres como la del barranco de Baby Yar, a las afueras de Kiev, donde unas 200.000 personas, hombres, mujeres y niños (judíos, discapacitados y prisioneros soviéticos), fueron asesinadas, después de obligarlas a cavar su propia fosa, y enterradas en capas, como sardinas en lata, tras un tiro en la nuca. Tener mala memoria de las cosas que sucedieron y echar la culpa a Rusia, como antes se echaba a la URSS, de todos los males mientras se hace el caldo gordo a los nazis no traerá nada bueno. Al contrario que EE UU, que tiene otras prioridades, los nazis europeos y sus aliados objetivos piensan derrotar a Rusia en Ucrania, y con eso a Putin y hacerse con Rusia y sus inmensas riquezas. Es exactamente lo mismo que pretendieron Napoleón y Hitler, que también se las prometieron felices. Nada de dar garantías de seguridad a Rusia, lo único que ésta quería antes de su intervención en Ucrania, y nada de hablar de ninguna paz si Rusia no devuelve el control del Donbás y de Crimea a los nazis y a sus padrinos de la UE y de la OTAN, y como Rusia nunca deja tirados a los suyos, pues nada, “habrá que derrotarla en el campo de batalla”. Borrell está encantador con su uniforme, Pablo Iglesias ya no engaña ni a las cucarachas dando pábulo en su TV a una periodista traidora y a Ursula von del Meyer le han puesto un casco nazi en las redes sociales. La gente no es tan idiota como ellos piensan, y tiene buena memoria.

martes, 9 de mayo de 2023

LAS DROGAS EN LA CAMPAÑA ELECTORAL

 


Todos estamos viendo como en la campaña electoral se están prometiendo cosas que antes no se prometían o, en el caso de los partidos en el Gobierno, que no se hicieron. Son los socialistas los que sobresalen prometiendo y dando cosas, todas a costa de nuestros bolsillos, naturalmente. Hace unos meses ya empezaron con los trenes “gratis” y ya anunciaron que darían 400 euros a los jóvenes, de más de 18 años, es decir, que puedan votar, para videojuegos y otras tonterías “culturales”, sin duda de vital importancia para el país. Comprar votos y voluntades con dinero público es muy grosero, más aún sin ni siquiera discriminar por renta, pero esa gente está acostumbrada a ello, ya Zapatero lo hizo ¿No ha sido también el “pesebre” un invento del PSOE? El facherío comenta en las redes sociales que teme un pucherazo de Sánchez, una vez que tiene bajo su control los instrumentos del recuento, pero el pucherazo será legal, repartiendo alegremente dinero de los impuestos de los ciudadanos o nacionalizando masivamente a nietos y biznietos de emigrantes españoles que no han pisado nunca España. En algunas CC AA de poca población, como Asturias, esos votos pueden ser decisivos. Sin embargo, el colmo de la desfachatez es la campaña provivienda de Sánchez, anunciando miles de pisos a precios asequibles y avalando, con nuestro dinero hasta el 20% de las nuevas hipotecas. Los bancos están encantados con estos “socialcomunistas”. Pero, D. Pedro, si no ha hecho usted ni un solo piso, ni una sola vivienda de los/las que prometió a los afectados por el volcán de La Palma. Eso sí, como anunciamos, ya han sido trasferidos a Defensa cientos de millones para tapar su agujero presupuestario por entrenar nazis y enviar armas y municiones a Ucrania, por unos terrenos en los que aún no se ha puesto, y posiblemente no se ponga nunca, un solo ladrillo. Yo creo, sin embargo, que estas cosas no servirán para ganar las elecciones, sino para ayudar a perderlas, no es una corazonada, me baso en lo que dicen las encuestas.

Aunque la pseudoizquierda me tiene muy enfadado, no quiero gastar toda mi bilis contra ella, porque tengo que guardar algo para los que vendrán, me temo que hará falta. El objeto de este artículo, como su título indica, no era mentar lo que ya todo el mundo comenta, sino de lo que casi nadie habla, ni los partidos del Gobierno ni la encantadora y variada oposición: El gravísimo problema de las drogas en España, tanto de las llamadas “blandas”, de las denominadas “duras” y de las que tienen tropezones. Entre estas últimas está el cannabis, por cuya legalización Iñigo Errejón (el único que, además de mí, habla de las drogas en esta campaña electoral, ya menos, eso sí, pero en sentido contrario) sigue peleando bajo la coartada de su “uso terapéutico”, cuando los médicos ya lo pueden recetar, como recetan la morfina, si hace falta. Nadie hablará de los 68.000 muertos por tabaquismo el año pasado en España, ni del problema del alcohol y otras drogas más duras entre los jóvenes y no tan jóvenes. Tampoco nadie nos va a contar porqué la Policía y la Guardia Civil tienen órdenes políticas de hacer la vista gorda y de no intervenir en narcopisos o en barrios enteros donde el tráfico de drogas se ha convertido en algo cotidiano. Tampoco nos van a explicar por qué se consiente que Marruecos sirva hachís a toda Europa a través de España y del tráfico por el Estrecho de Gibraltar ni por qué se tolera que La Roca sea, además de un paraíso fiscal, una base logística para el narcotráfico entre Marruecos y España. Los primos se besan mientras tanto en la coronación de Carlos III y el Gobierno espera cerrar cuanto antes un acuerdo que necesitan como el comer los que ya no son de la UE. Todos los partidos calladitos, como putas, mientras las drogas acaban con la salud y la vida de mucha gente. Las drogas NO serán un asunto de debate en la campaña electoral, aunque, por ejemplo, casi en el 50% de los conductores muertos en accidentes de automóvil en 2022 se detectó la presencia de alcohol, drogas o psicofármacos.