viernes, 25 de noviembre de 2011

VIOLENCIA EN MÉXICO

Parece que también en este siglo XXI que estamos empezando la barbarie, como también sucediera en el XX, se va a adueñar de las vidas de mucha gente, no hay mas que levantar la vista y mirar a nuestro alrededor, pero tenemos una especial preocupación por lo que, desde hace años, está sucediendo en México, país hermano muy querido, algo que cada vez se hace mas cotidiano.
La proliferación de asesinatos y ajustes de cuentas, precedidos habitualmente de atroces torturas, ya se está haciendo tan habitual en esa república que incluso se corre el riesgo de que algo tan inaceptable y tan terrible acabe siendo consustancial a las vicisitudes diarias de los mexicanos. Según las encuestas, solo una de cada 10 personas entrevistadas tiene confianza en que las autoridades vayan a poner coto a este estado de cosas. Y la ciudadanía no es tonta, sabe porqué suceden estos delitos y conoce perfectamente qué políticos corruptos e incapaces la gobiernan.
El horror se ceba en México con las mujeres de Ciudad Juárez, que desaparecen sin dejar rastro o vuelven a aparecer muertas, con los integrantes de los cárteles de la droga, que se torturan y matan entre sí, escalando cada vez un peldaño mas hacia la esquizofrenia criminal, pero también contra los pocos representantes honrados y valientes de la república, algunos políticos, jueces y policías a los que les arrebatan la vida por defender a sus compatriotas y a la Ley. También han caído periodistas por desempeñar su labor heroicamente. Guadalupe ya se ha incorporado esta semana a las 20 ciudades mexicanas que están entre las cincuenta mas violentas del mundo,
El pueblo de México tiene que decir alto y claro "basta ya" y exigir a los máximos responsables del Gobierno de la nación que tomen todas las medidas necesarias para acabar con lo que está pasando, con la declaración del Estado de Sitio o de Guerra, si es necesario, y movilizándose, todos a una, contra este cáncer asesino que está minando salvajemente las estructuras de la convivencia y de la propia democracia. El presidente Calderón ha mandado salir a las calles a las tropas federales, pero con mandato limitado. No se la puede coger uno con papel de fumar cuando enfrente hay unas organizaciones criminales bien organizadas dispuestas a todo.
Se tienen que acabar las complicidades y las medias tintas, no puede ser que cada mañana la gente tenga que desayunar con los miembros mutilados y los cadáveres calcinados de los mexicanos en los informativos. O las autoridades se ponen como objetivo inmediato acabar con el crimen, en serio y de verdad, o ellos mismos se pondrán en el punto de mira del pueblo azteca.

No hay comentarios:

Publicar un comentario