ZAPATERO CULPA AL PP DE LA CRISIS

Sí, ya sabemos que hay ser ser un poco masoquistas para seguir los debates del estado de la Nación, pues hace mucho tiempo que la clase política ha perdido el sentido de la realidad y habla y discute sobre cosas que a los ciudadanos, que tienen otras prioridades y otros problemas, o no les interesan o les irritan. Sin embargo, siempre se pueden aprender cosas, como hasta donde se puede alargar el límite de la mentira, de la infamia o de la manipulación, o hasta que punto uno puede estar huérfano de argumentos, intentar vender la piel del oso antes de cazarlo, o simplemente ser un parlamentario mediocre.
Como siempre sucede cuando hay estos debates, se discutirá sobre quién fue mas brillante o quién ganó y la opinión suele estar mediatizada por la subjetividad que da la militancia o el fanatismo, que muchas veces, desgraciadamente, van asociados
De entre las muchas tonterías que escuchamos, tenemos que resaltar la pretensión de Zapatero de hacer recaer sobre la oposición la responsabilidad de la crisis, algo que viene intentando desde hace meses, con el argumento de que los populares no quieren arrimar el hombro. Admitió el presidente que, en efecto, se equivocó cuando no quiso ver la crisis que todos teníamos delante de las narices, pero volvió a incurrir en falsedades, que no por repetirlas cien veces se van a volver ciertas, como que nadie había previsto lo que iba a suceder. Zapatero, empleó una dialéctica endeble muy fácil de desmontar, pero no precisamente por Rajoy, por eso la utilizó contra él. Dijo que el verdadero problema de España no era tanto el endeudamiento público, que estaba por debajo del que tienen muchos países de la UE, como el privado, provocado por la burbuja inmobiliaria que hinchó el Gobierno de Aznar. En realidad, sin embargo, el endeudamiento del Estado español, incluidas CC AA y ayuntamientos, es muy superior a lo que se dice y, lo que es peor, España no tiene la capacidad productiva necesaria para amortizarlo, como sí la tienen Alemania y Francia, por ejemplo, por eso el diferencial de nuestra Prima de Riesgo ha llegado estos días a los 300 puntos básicos. Además, si bien es cierto que los Gobiernos del PP se embarcaron irresponsablemente en el crecimiento sobre la ola del “ladrillo”, también lo es que las CC AA y los ayuntamientos gobernados por los socialistas se sumaron a la vorágine. No recordamos ninguna crítica parlamentaria del PSOE, cuando gobernaba el PP, a lo que estaba sucediendo en España alrededor del sector inmobiliario. También hay que decir que los socialistas llevaban mas de una legislatura en el poder sin que hubieran cambiado esas políticas heredadas y que solo el estallido financiero, provocado por las hipotecas basura, y la consiguiente crisis le han hecho caer de la higuera.
Zapatero también dijo algo que nosotros ya habíamos anunciado, “no habrá mas reformas que pongan en peligro el “Estado de Bienestar”. Después de las subidas indiscriminadas de impuestos, incluido el IVA, la congelación de las pensiones, la elevación de la edad de jubilación y del cómputo anual para establecer la prestación, la rebaja del salario de los funcionarios, el abaratamiento del despido, etc, pocas reformas, es decir, recortes sociales, porque no se han hecho reformas de ningún otro tipo, quedan por hacer, pero, además, las elecciones generales están a la vuelta de la esquina y ya dijimos que el PSOE y Rubalcaba pretenderán reconciliarse con los trabajadores, engatusándolos disfrazados de izquierdistas, antes de que pasen por las urnas.
Rajoy lo tenía muy fácil, sobrepasar al PSOE por la izquierda sin necesidad de moverse de la derecha y no es una táctica futbolística. “No admitiremos mas ataques contra el bienestar y los derechos sociales de los ciudadanos porque las reformas que España necesita y el imprescindible equilibrio presupuestario se pueden conseguir de este otro modo....”, pero eso no parece estar en su discurso. Ya advertimos al PP que si no logra centrarse y hacer un guiño a los trabajadores perderá las elecciones, porque el PSOE dirá, puede que con razón, que el programa oculto de reformas de Rajoy es todavía mas duro que el suyo.