Si en el pasado Junio las noticias desagradables y desastrosas proliferaron, el mes que acaba de empezar va camino de superarle con creces. Para la mayor parte de la ciudadanía lo peor del día 1 de Julio ha sido la subida del IVA, del gas natural y de la bombona de butano, pero le aseguro que, con ser asuntos dolorosos para nuestros bolsillos, son "pecata minuta" comparados con otros mucho mas graves que acontecen estos mismos días.
En este mes de Julio las entidades financieras españolas tenían que hacer frente a los préstamos que el Banco Central Europeo les había concedido el día 7 Mayo, con un vencimiento a tres meses, cuando nuestro país se encontraba en quiebra técnica. A pesar de las historias que nos han contado sobre la solvencia de los bancos y Cajas de Ahorro españoles, la verdad es que no estaban en disposición de poder devolver el citado préstamo, eso que, como usted sabe, también recibieron ingentes cantidades de dinero público cuando estalló la crisis. El BCE se ha visto en la necesidad de dar otro crédito de 131.900 millones de euros, a tres meses, a un interés del 1%, a los bancos europeos y, particularmente, a los españoles. Prestar dinero a un deudor para que te pague no es buena política, mas, si la recuperación de la economía española no se ve por ninguna parte y la explosión de la burbuja inmobiliaria va a seguir haciendo mucho daño. Mucho peor sería una argentinización de España, piensa el Fondo Monetario Internacional y Angela Merkel.
El director gerente del FMI, Dominique Strauss Kahn, ha dicho que "hay fondos de liquidez para casos como España", eso sí, también ha manifestado "que no se identificará al país rescatado para evitar estigmatizarle", entre nosotros, por supuesto, no vamos a andarnos con tonterías, el BCE ya ha acudido este mes al rescate, pero solo será alargar la agonía y dilatar en el tiempo la asunción de la verdad. Ya dijimos en varias ocasiones que una de las consecuencias de la crisis económica, junto con los ataques a los derechos sociales, sería que la democracia correría serios riesgos. El oscurantismo es un síntoma de ellos, pero la tutela de los Estados desde instituciones y organismos (y de gente poderosa que se reúne de vez en cuando) no elegidos por el pueblo, brazos ejecutores del capitalismo globalizado, es la principal amenaza. Los países iberoamericanos nos podrían dar muchas lecciones sobre el asunto porque lo han sufrido en sus carnes durante decenios.
Otro tema que va a seguir dando que hablar es el problema surgido a raíz de la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatuto de Cataluña. También advertimos que el PP sería objeto de las iras de los nacionalistas y del Gobierno de Zapatero. María Dolores de Cospedal, ingenuamente, ha entrado al trapo. Es triste decirlo, pero los dirigentes del principal partido de la oposición harían bien en estar calladitos, en no hacer ningún tipo de manifestación sobre el asunto y sobre los tejemanejes que se traen entre manos los socialistas y sus aliados separatistas, lo inteligente sería dejar que se cocieran en su propia salsa, la de la irresponsabilidad y el golpismo. En efecto, Zapatero y el presidente de la Generalitat se van a reunir para ver como enderezar la situación, bordeando la sentencia del Constitucional a base de leyes orgánicas, decretos leyes o lo que haga falta. Mientras, en Cataluña no se han dado por enterados, han elevado a un millón de euros la sanción a los comerciantes que no pregunten a sus clientes en catalán. Ningunear al poder judicial y obrar al margen de la Ley de Leyes sería la mayor irresponsabilidad en que pueden caer algunas fuerzas políticas. Ya hay voces que piden revisar la Constitución, la que juraron o prometieron, para cargarse definitivamente al Estado, a esta España que tanto esfuerzo nos costó conseguir. Primero los nacionalistas quisieron un Estado de las Autonomías, ahora pretenden un Estado Federal Asimétrico (nunca les gustó lo de "café para todos") pero, usted y yo sabemos perfectamente cual es su meta.
En este mes de Julio las entidades financieras españolas tenían que hacer frente a los préstamos que el Banco Central Europeo les había concedido el día 7 Mayo, con un vencimiento a tres meses, cuando nuestro país se encontraba en quiebra técnica. A pesar de las historias que nos han contado sobre la solvencia de los bancos y Cajas de Ahorro españoles, la verdad es que no estaban en disposición de poder devolver el citado préstamo, eso que, como usted sabe, también recibieron ingentes cantidades de dinero público cuando estalló la crisis. El BCE se ha visto en la necesidad de dar otro crédito de 131.900 millones de euros, a tres meses, a un interés del 1%, a los bancos europeos y, particularmente, a los españoles. Prestar dinero a un deudor para que te pague no es buena política, mas, si la recuperación de la economía española no se ve por ninguna parte y la explosión de la burbuja inmobiliaria va a seguir haciendo mucho daño. Mucho peor sería una argentinización de España, piensa el Fondo Monetario Internacional y Angela Merkel.
El director gerente del FMI, Dominique Strauss Kahn, ha dicho que "hay fondos de liquidez para casos como España", eso sí, también ha manifestado "que no se identificará al país rescatado para evitar estigmatizarle", entre nosotros, por supuesto, no vamos a andarnos con tonterías, el BCE ya ha acudido este mes al rescate, pero solo será alargar la agonía y dilatar en el tiempo la asunción de la verdad. Ya dijimos en varias ocasiones que una de las consecuencias de la crisis económica, junto con los ataques a los derechos sociales, sería que la democracia correría serios riesgos. El oscurantismo es un síntoma de ellos, pero la tutela de los Estados desde instituciones y organismos (y de gente poderosa que se reúne de vez en cuando) no elegidos por el pueblo, brazos ejecutores del capitalismo globalizado, es la principal amenaza. Los países iberoamericanos nos podrían dar muchas lecciones sobre el asunto porque lo han sufrido en sus carnes durante decenios.
Otro tema que va a seguir dando que hablar es el problema surgido a raíz de la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatuto de Cataluña. También advertimos que el PP sería objeto de las iras de los nacionalistas y del Gobierno de Zapatero. María Dolores de Cospedal, ingenuamente, ha entrado al trapo. Es triste decirlo, pero los dirigentes del principal partido de la oposición harían bien en estar calladitos, en no hacer ningún tipo de manifestación sobre el asunto y sobre los tejemanejes que se traen entre manos los socialistas y sus aliados separatistas, lo inteligente sería dejar que se cocieran en su propia salsa, la de la irresponsabilidad y el golpismo. En efecto, Zapatero y el presidente de la Generalitat se van a reunir para ver como enderezar la situación, bordeando la sentencia del Constitucional a base de leyes orgánicas, decretos leyes o lo que haga falta. Mientras, en Cataluña no se han dado por enterados, han elevado a un millón de euros la sanción a los comerciantes que no pregunten a sus clientes en catalán. Ningunear al poder judicial y obrar al margen de la Ley de Leyes sería la mayor irresponsabilidad en que pueden caer algunas fuerzas políticas. Ya hay voces que piden revisar la Constitución, la que juraron o prometieron, para cargarse definitivamente al Estado, a esta España que tanto esfuerzo nos costó conseguir. Primero los nacionalistas quisieron un Estado de las Autonomías, ahora pretenden un Estado Federal Asimétrico (nunca les gustó lo de "café para todos") pero, usted y yo sabemos perfectamente cual es su meta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario