¿RESCATE A ESPAÑA?

A pesar de que el presidente Rajoy había dicho hace una semana que España no necesitaba un rescate, se ha impuesto la intervención de nuestras entidades con una línea de crédito del Fondo Europeo de Rescate de hasta 100.000 millones de euros (mas de 16 billones de pesetas) que tendrán que pedir los entes financieros salidos de la fusión de las Cajas de Ahorros para tapar el gigantesco agujero del ladrillo.
Antes de entrar en el análisis de qué significa y en que nos va a afectar esta operación, constatar dos cosas: en primer lugar que la mentira se ha hecho tan cotidiana en el discurso político de los partidos y los Gobiernos que la opinión pública no solo ya no se escandaliza, la encuentra natural. En segundo, que el PSOE, principal partido de la oposición, y su líder, Rubalcaba, compiten con Rajoy en el arte de los embustes, criticando ante los medios de información la inyección del dinero europeo a la banca mientras, entre bambalinas, han dado su aprobación; cosa lógica por otra parte, pues comparten con el PP la responsabilidad de la fechoría financiero-inmobiliaria que se ha producido en España en los últimos años y que ha puesto a nuestro país a los pies de los caballos.
Tras las presiones del G-7, que han convencido a la canciller Merkel, el Banco Central Europeo ha puesto a funcionar la máquina de hacer billetes con inusitado frenesí, como vienen haciendo desde hace tiempo el Tesoro norteamericano y los bancos centrales de Reino Unido y Japón. Es de locos, porque se están imprimiendo ingentes cantidades de papel moneda que no tienen ningún valor real y lo peor es que ese dinero no se está valorizando con inversiones en actividades productivas sino que se está utilizando para pagar gastos corrientes, incrementando la Deuda de los estados hasta cifras estratosféricas. EE.UU, por ejemplo, ya tiene una Deuda por encima de los 16 billones de dólares, mas del 110% de su PIB. ¿Quiere esto decir que el papel moneda fabricado para tapar los tremendos errores de los políticos y que estos puedan salvar la cara, al menos de momento, son simples "estampitas"?, pues sí, pero solo de momento. Como hemos dicho, ese dinero se tiene que valorizar, es decir, para que adquiera un valor real se tiene que cambiar por bienes que sí lo tengan. Los 100.000 millones de euros que la UE ha puesto a disposición de España, por ejemplo, y que van a tener un interés de entre el 3 y el 4%, van a servir para comprar los llamados activos tóxicos de los bancos, es decir, los cientos de miles de viviendas vacías e impagadas. La intención es que sean los ciudadanos los que paguen dos veces, mas los intereses, las viviendas que la banca piensa sacar al mercado. Por un lado se pagará el rescate vía impuestos y mas recortes sociales y por otro la hipoteca que impondrá la banca a unos pisos que, con el dinero de todos, serán completamente suyos. Es un escándalo mayúsculo pero, como con las mentiras de los políticos, eso también se ha hecho cotidiano.
El presidente Rajoy habló en rueda de prensa para vendernos como un éxito que estaremos mucho mas endeudados y que tendremos que sufrir mucho para poder pagar el rescate, pero se hace el remolón para acudir al Parlamento a dar la cara ante los representantes de los ciudadanos. De momento, pese a la gravedad de lo que está pasando, ha dicho que no piensa comparecer en el Congreso de los Diputados hasta julio, eso sí, mientras acudirá a algunos partidos de la selección española de fútbol.
No hace falta ser un experto en finanzas para darse cuenta de que todo esto es un gigantesco error y de que las medidas que se están tomando van a agravar mucho mas la situación hasta hacerla insostenible, pero también el premio Nobel de Economía y uno de los pocos que previó la crisis financiera, el norteamericano Paul Krugman, ya ha dicho que el abismo está servido.
Pues no, los 100.000 millones no son un rescate porque no van a servir para rescatarnos. Eso mismo piensan los mercados y por eso el diferencial de la prima de riesgo con el bono alemán continúa por encima de los 500 puntos básicos.