martes, 26 de enero de 2010

LAS ELECCIONES DE 2.011


El próximo año, si no pasa nada raro, habrá elecciones autonómicas y municipales en Asturias. El Gobierno del Principado, de siete legislaturas, seis ha estado en manos de los socialistas, bien en solitario o con la alianza de IU. Algunos ayuntamientos importantes, como el de Gijón, han seguido parecida senda. Pero, por primera vez en mucho tiempo, las cosas no están nada claras. El diario el Mundo publicaba lo que muchos sabían, en algunos feudos socialistas tradicionales, como Asturias y Andalucía, el poder del PSOE se tambalea. Hay unos cuantos factores que, sin duda, han influido en la pérdida de confianza de los electores, el primer lugar la pésima gestión de la crisis, tanto a nivel estatal como autonómico, pero también el hastío de la sociedad hacia esa clase que se ha instalado, sin pudor, entre nosotros, los políticos, con sus excesos y su desprecio por la opinión de la calle. Esto, naturalmente, afecta a casi todos los partidos con responsabilidades de poder. Hay un libro, "La Casta", de Daniel Montero, sobre este tema, que está causando furor en Internet. En la FSA hay gente que piensa que va a ser muy difícil mantener la hegemonía en la región y en el Gobierno del Principado. Algunos, como el señor Areces, maestro del oportunismo y del modus vivendi, desde la Conferencia de Perlora del PCA de finales de Marzo de 1.978, ya han decidido buscarse un placentero retiro, no serán los únicos. Otros, dinosaurios que se resisten a la extinción, como el Secretario General del Soma-FIA-UGT, sindicalistas enganchados al cordón político umbilical, no se dan por enterados de que su reinado, como el de la era carbonífera, se ha terminado. Es la hora de los que llevan tiempo esperando su oportunidad. Si analizamos el mapa de los resultados de las elecciones autonómicas en Asturias en 2.007 tenemos que sacar una conclusión evidente. La diferencia de sufragios entre el PSOE y el PP fue mínima (252.201 y 248.907 respectivamente) por lo que, a primera vista, parecería que los votos de IU y de la inmigración, otra vez, pudieran resultar decisivos para formar gobierno. Se están tomando medidas para mantenerse en el poder a toda costa. En este sentido, seguramente la decisión de empadronar inmigrantes ilegales no es inocente, lo que resulta diáfano es la utilización partidista del dinero público para viajes, pretendidamente institucionales y promocionales, en América. Allí, dejémonos de tonterías, van a ir a hacer campaña electoral. Pero hay factores que, a pesar de los tejemanejes, pueden alterar, y mucho, los resultados de las próximas convocatorias. Uno de ellos, no baladí precisamente, sería la irrupción de Francisco Alvarez Cascos en la política regional. Otro podría ser la pérdida de votos de UI, ya bastante desgastada por el enfrentamiento entre el PCA y los dirigentes regionales, si la coalición se lava las manos ante las fechorías medioambientales que los socialistas nos tienen reservadas. También es una incógnita lo que puede suponer la aparición de UPyD, que lleva tiempo creciendo exponencialmente y que podría recoger muchos votos de los que ya están hasta las narices. Si el partido de Rosa Díez consigue transmitir un mensaje que rompa moldes puede ser decisivo para la futura gobernabilidad de Asturias. Se presenta un año interesante donde, unos y otros, se tendrán que retratar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario