Ya estamos acostumbrados a la breve periodicidad de los atentados. A los de ETA y su entorno callejero, a los que ocurren en Irak y Afganistán, a los de Pakistán y pronto a los que empiezan a proliferar en Irán. Junto con la ensalada de muertos hechos picadillo y bien regados en sangre, se nos sirve diáfana, para que no tengamos dudas, la autoría. "Los terroristas vascos", "Al Qaeda", "la oposición interna", "los fanáticos musulmanes". Yo les aseguro que, a veces, los autores intelectuales e incluso los que ponen las bombas son otros. La gente, cuando se pone a pensar, suele sacar conclusiones que no siempre coinciden con las versiones oficiales. ¿Quién provocó la explosión del "Maine", que fue un buen pretexto para que los EE UU arrebataran a España Cuba y Filipinas? ¿quién estuvo detrás del atentado de Sarajevo que desencadenó la Primera Guerra Mundial? ¿quién, de verdad, asesinó a los Kennedy? ¿fué inequívocamente ETA la que acabó con Carrero Blanco?¿quien organizo los grupos terroristas albanokosovares para hacer atentados en los balcanes?¿quién, en fin, está verdaderamente detrás de muchos de los atentados en Oriente Medio?. Si la gente de la calle supiera algunas de las cosas que conocen y hacen los servicios secretos sería el mayor escándalo de la Historia. Aunque no siempre es así, los verdaderos autores de los atentados suelen ser los que mas se benefician de ellos.
J. Jesús J. Suárez González
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