LA GUARDIA CIVIL SE CABREA

 

La Benemérita ya estaba muy enfadada con la Dirección General de la que depende y con el Ministerio del Interior, del que depende también (aunque también depende del Ministerio de Defensa). “Nos toman por tontos y quieren condenar al cuerpo al ostracismo”. Seguramente exageran un poco, pero no demasiado. La retirada de competencias en Navarra y Cataluña no ha gustado a la Guardia Civil, como no ha gustado a muchos españoles que no somos guardias civiles, pero es que, además, hay asuntos operativos que claman al cielo: discriminación negativa con otros cuerpos, falta de personal y de dotación de materiales adecuada y leyes que protegen más a los delincuentes que a los que tienen que hacer cumplir la Ley. Aunque cada vez hay más delincuencia y más crimen organizado, no se dota a la Guardia Civil, la punta de lanza en la defensa y protección de los ciudadanos, de lo que necesita. La Benemérita ya fue la vanguardia en la lucha contra el terrorismo, pagando con su vida y la de sus familiares el servicio a España y a los españoles, algo que no ha sido reconocido suficientemente por esta sociedad, pero, el colmo de los despropósitos ha sido la nueva dotación de pistolas que se ha empezado a entregar al cuerpo, que no son otras que una mala copia de la prestigiosa arma austriaca Glock 19. Se trata de unas pistolas fabricadas en Israel, de nombre Ramón, que se encasquillan continuamente. En vez de sustituir las antiguas Beretta de la Guardia Civil por unas pistolas de garantía, como las Heckel & Koch alemanas, de dotación en las FF AA y también en su versión compacta (USP Compact) en la Policía Nacional, se ha optado por ahorrar dinero a costa de la seguridad de los pupilos del Duque de Ahumada. Dos son las pistolas en tamaño compacto que sobresalen en los cuerpos policiales de todo el mundo, una es la muy prestigiosa pistola austriaca, Glock 19 y la otra, más moderna y más eficiente aún, la Sig Sauer P-320 que, a mi entender, debería haber sido la elegida. De hecho, el Grupo Especial de operaciones (GEO) ya utiliza la Sig Sauer P-320 y otros grupos de élite de la policía española (que van de paisano) usan la Glock 43X, un modelo supercompacto que sustituyó a los antiguos revólveres Astra con cañón de dos pulgadas. Tanto la Glock 19 austriaca como la Sig Sauer P-320, que se fabrica en la localidad de Exeter (EE UU) son dos pistolas de garantía, muy parecidas, ligeras (abundan los polímeros en su construcción) y con cargadores para 15 cartuchos en calibre 9x19 mm, pero la P-320 tiene algunas características que la hacen sobresalir y que no vamos a detallar aquí, por eso también la Navy se decidió por ella. Así que la Guardia Civil tiene razón en estar cabreada, hay cosas con las que no se debe jugar, y la vida de sus miembros debe ser los prioritario para sus superiores, juez y jueza que quizá sepan mucho de leyes, pero que está claro que de armas y/o de decencia, no tienen ni idea. Francamente, a mí me cabrea mucho que se despilfarren miles de millones en chorradas, mientras se escatiman unos pocos en lo fundamental: Que se te encasquille el arma cuando te enfrentas a delincuentes armados es lo peor que te puede pasar.