Lo que está sucediendo en Siria parece un calco de lo que en su día vimos en Libia. Se trata de la misma estrategia que diseñó el general de cuatro estrellas, en su día comandante de las fuerzas estadounidenses en Oriente Medio y luego director de la CIA, David Petraeus, crear el caos para luego explotarlo en el propio beneficio. Todos vimos en qué convirtieron Libia, que era el segundo país en renta per cápita de África, tras España (hay gente que aún no se ha enterado de que España, además de europeo, es un país africano). Los que llevaron a Libia a una guerra, “para poner allí la democracia”, son exactamente los mismos que han patrocinado la guerra en Siria, y en otros lugares. En estos dos países, además, se han valido de los mismos métodos y de los mismos o parecidos instrumentos, entre ellos usar a mercenarios terroristas yihadistas. En Libia entraron en largas columnas de vehículos 4x4 Toyota completamente nuevos, donados gentilmente por Arabia Saudí y que fueron artillados en Egipto con armas ucranianas, y en Siria lo han hecho desde Turquía, adonde habían huido los terroristas del antiguo Frente Al Nusra (al que Arabia Saudí y la CIA cambiaron de nombre para lavarle la cara), es decir, de una sucursal de Al Qaeda y del ISIS. Estamos hablando, digámoslo sin ambages, de la CIA con chilaba. Es curioso observar como los rebanacuellos, los que crucificaban cristianos y los que convertían en esclavas sexuales a las mujeres yazidíes, como por encanto y merced a los medios de comunicación occidentales, que cada vez tienen menos credibilidad, se han convertido en “rebeldes” cuando no en la “oposición moderada”. Al Assad, era "un criminal dictador", dicen, y estos que le han sucedido son unos "demócratas". El mundo al revés, el negro ahora es blanco y la mierda una delicatessen.
¿Ha visto usted algún bombardeo sionista, sí, del Israel que bombardeaba Siria un día sí y al otro también, estas últimas jornadas contra las columnas de terroristas yihadistas? Al contrario, los sionistas han aprovechado la ocasión para entrar en Siria desde los Altos del Golán ocupados a ver si pueden robar otro trozo de tierra ¿Ha visto usted algún atentado del ISIS contra Israel? Yo tampoco. Centenares de miles de Sirios están huyendo, cuando escribo estás líneas, hacia Líbano, un país también bombardeado por Israel y que será la siguiente víctima del Imperialismo. Habrá oleadas de refugiados que vendrán hacia Europa, esta vez no se van a quedar en Turquía con el dinero de la EU mientras EE UU y Erdogan los armaban y preparaban para invadir Siria. Así que, como pasó en Libia, espero que los idiotas que están apoyando todo esto no sean luego los mismos que critiquen la inmigración irregular masiva. EE UU ha convertido Oriente Medio en un cementerio, es la mano que mece la cuna del genocidio en Gaza y hará todo lo posible para que el caos siga para beneficiarse. Un personaje, que nos había engañado a muchos, está emergiendo en medio de este asunto, es el presidente turco Erdogan, un tipo impresentable, cercano al fundamentalismo musulmán, que está construyendo un poderoso ejército y que quiere tener otro imperio otomano. Turquía ha intervenido militarmente en Libia, en Azerbaiyán, en Irak y también en Siria. Erdogan quiere un trozo de la tarta, de la tarta donde EE UU roba el petróleo y los sionistas robas tierra. Son todos ellos como los buitres sobre la carroña de los sirios muertos. Tome usted buena nota de todo esto, que se lo recordaré dentro de unos meses.
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