¿De verdad pensaba usted que no
iba a tener que valorizar con sus sacrificios todo el dinero fiat que se ha
estado imprimiendo y repartiendo gentilmente en Occidente? Usted sabe, y si no
lo sabe se lo digo yo, que la crisis económica que padecemos tiene poco que ver
con la guerra en Ucrania y mucho con las locas políticas monetarias que los
bancos centrales y las instituciones supranacionales occidentales han estado
implementando y patrocinando en los últimos años, aunque ese conflicto armado y
las sanciones a Rusia no están ayudando, por supuesto, sobre todo a Europa.
Pues bien, a pesar de toda esa inyección artificial de dinero en las economías,
las deudas soberanas de los países han seguido aumentando, en algunos, como el
nuestro, de forma estratosférica, porque, obviamente, se ha estado gastando
mucho más dinero que el que se ingresaba, pero no en inversión, sino en
administraciones sobredimensionadas, ocurrencias, chiringuitos y mil y una
otras chorradas. Endeudarse para comprar un piso, si no puedes comprarlo al
contado, es de sentido común, lo que no tiene pase es endeudarse para salir de
juerga. Son precisamente esos que han comprometido su futuro en la adquisición
de una vivienda los que ahora peor lo van a pasar. No solo tendrán que pagar en
productos y servicios todas las subidas que esta inflación inducida está
provocando, además tendrán que pagar, si pueden, las subidas del euríbor y, en
consecuencia, de las hipotecas. Cuando escribo estas líneas el Banco Central
Europeo acaba de anunciar la subida de los tipos de interés otro medio punto,
hasta el 3%, pera la directora del BCE, Cristine Lagarde, ya ha anunciado que
se subirá dentro de unos meses otro 0,5%. Maravilloso. También nos han dicho
que seguramente no habrá más subidas, pero que tendrán que analizar primero los
resultados que van a provocar los incrementos en el precio del dinero que ya
están realizando antes de confirmarlo. Mejor es hacer los experimentos con gaseosa que con las vidas
de las personas, pero, este es un principio solo para la gente cabal y decente. Estamos en
una coyuntura económico–social diabólica que hasta ahora, a pesar de que la
gente ha visto disminuir dramáticamente su poder adquisitivo, no ha provocado
levantamientos populares generalizados, aunque ya los hemos visto masivos en
Francia y Reino Unido, merced a que los sindicatos están muy quietecitos mientras comen de la mano de los gobiernos, pero, esto es
algo así como cuando se mete una botella casi llena de agua en el congelador
del frigorífico, mientras el recipiente acoja y aguante la expansión del hielo
todo va bien, hasta que la botella explota si el margen para la expansión era muy pequeño, y eso sucede en un instante. Nos
han estado tomando el pelo desde 2008, y antes, y como han visto que no les ha
pasado nada piensan seguir haciéndolo. Ya barajan congelar las hipotecas para
evitar impagos masivos, pero eso no quiere decir dejarlas como están, no se
equivoque usted, lo que quiere decir es que pagará lo mismo al mes, pero
durante más años y con más intereses, que ni de coña es lo mismo. Para
entendernos, más negocio para los bancos y más salvar el culo a las entidades
financieras y usted encima tendrá que dar las gracias al Gobierno, porque la
alternativa sería el desahucio. Es todo muy obsceno, pero lo más obsceno de
todo es que mientras la gente lo está pasando tan mal y muchas familias ya no
llegan a fin de mes, eso sin encender la calefacción, sin salir a tomar algo y
privándose hasta de algunos alimentos, las petroleras y los bancos anuncias
beneficios históricos. Sí se lo echas en cara a esas multinacionales te dicen
que eso se debe a sus beneficios en América, y si se lo echan en cara en
América, allí les dicen que eso se debe a sus beneficios en Europa. Otras grandes
compañías transnacionales, como las del acero, reciben miles de millones de dinero
público para renovar sus factorías achatarradas tras años con muy pocas
inversiones. Que no nos hablen de dictaduras y autocracias, vivimos en una
dictadura y una "multicracia" de las grandes corporaciones, los bancos y los
políticos a su servicio, pero muchos aún no se han dado suficientemente cuenta.
Siempre he creido que una democracia es la peor de las dictaduras... El voto de un licenciado vale lo mismo que el de un analfabeto, y estos ultimos son mayoria... Estamos yá en periodo electoral encubierto ( o no tanto), vamos a ver promesas,falacias,fantasias de todo tipo.... pero al final nada cambia, nada... Y no cambia porque probablemente no se puede cambiar, sinceramente, yo no veo otro sistema alternativo a la sociedad actual ( bueno sí, la del Irrepetible, pero es otra historia) . Tendremos que apretarnos mas el cinturon y la cosa seguirá mas o menos igual tras las elecciones,gobierne quien gobierne, el bacalado viene cortado de la UE..tambien podriamos salirnos de ella ,volver a la peseta y a ser un `pais soberano como antes de 1975... Otra vez, en que estare pensando
ResponderEliminar