Para el artículo de hoy, que versa sobre la aprobación de los presupuestos en el Ayuntamiento de Madrid, había barajado el título de "El ajedrez madrileño", pero finalmente, después de darle unas cuantas vueltas, me he decidido por otro, seguramente más ligado a la realidad. Me explico: Es de conocimiento público la guerra abierta entre la dirección del PP, con su presidente al frente, y la presidenta de la Comunidad Autónoma de Madrid, Isabel Natividad Díaz Ayuso, que no es más que un títere en manos de los poderes fácticos madrileños, de FAES y de José María Aznar, para eso está allí Miguel Ángel Rodríguez, que es el hombre de Aznar que le escribe los discursos y las ocurrencias a Ayuso. Estamos hablando de una mujer a la que gusta más el protagonismo que a un tonto un caramelo, aunque sus acciones, y sus opiniones, las teledirijan otros, pero que no calibra bien sus acciones. Pablo Casado fue elegido en un congreso democrático de su partido y nada más ser elegido obró en consecuencia purgando a casi todos los hombres y las mujeres de Rajoy. Casado, aunque cuando se habla de corrupción en su partido nos dice que él entonces pasaba por allí, la verdad es que, además de ser diputado por Ávila, ya tenía un cargo importante en el PP, el de vicesecretario general de comunicación, y sabía de sobra lo que allí había, por eso cuando pudo cogió la escoba y los barrió a todos/das. Pero, Casado cometió el error de meter en las listas electorales y de dar cargos de gran relevancia política a personas que no están a sus órdenes, ni tampoco a las órdenes de la gente que los votó. Hace unos días Ayuso manifestó, sin cortarse un pelo, que no iba a supeditar sus políticas sanitarias a lo que dijera la dirección del PP. Blanco y en botella y para muestra basta un botón. Si no hay disciplina todo el mundo se te sube a las barbas y Casado es consciente de ello y está obligado a obrar en consecuencia. En el PSOE este asunto lo tienen muy claro, recordemos aquello que decía Alfonso Guerra de "El que se mueve no sale en la foto", pero todavía lo tenía mucho más claro V. I Lenin, que en su primer discurso tras el triunfo bolchevique en la Rusia de 1917 dijo esto: "Camaradas, a pesar de los errores de los soviets y de la propia dirección del Partido, hemos vencido, el poder es nuestro. La clave de nuestro éxito ha sido la disciplina, nada hubiéramos logrado sin disciplina. No hay nada más democrático que la disciplina, el centralismo democrático, la supeditación de los órganos inferiores a los superiores y de las minorías a las mayorías". Y esto vale para un partido político, para un equipo de fútbol, para una empresa o para un ejército. Casado tenía que dejar claro quien manda y que ni Ayuso, ni Aznar ni Vox van a mediatizar las políticas y las decisiones de la dirección del PP y de su presidente. Esta es la clave de lo que ha pasado en el ayuntamiento de Madrid que, a buen seguro, veremos en otros sitios. Hasta aquí el ajedrez. Pero, Madrid, además de un complejo campo de batalla político, es también un gallinero político, no solo en la derecha, allí la izquierda se lleva la palma de la rebelión en la granja, tanto en el Ayuntamiento como en la Comunidad Autónoma. Paracaidistas, oportunistas, baloncestistas, traidores, trásfugas, etc, nadie ha sido capaz de poner un punto de sensatez y de imponer la disciplina en la izquierda madrileña. En los últimas elecciones hemos visto como la izquierda se fraccionó y como, con esa fracción, entregaron el poder a la derecha. Desde Tamayo y Sáenz, las traiciones y los navajazos traperos han sido moneda corriente en la izquierda madrileña, bien tan groseramente como los que se vendieron a cambio de dar su voto para que fuera elegida Esperanza Aguirre, bien creando partidos nuevos a medida de su líder, como Más Madrid, bien traicionando a los que te pusieron de alcaldesa cuando no te conocía nadie, como los de Manuela Carmena. Han sido precisamente cuatro trásfugas carmenistas los que han dado sus votos para que Almeida sacara adelante sus presupuestos, a cambio de cosas como medio millón de euros para el día del "Orgullo" y alguna que otra chorrada más y con la coartada de dejar a Vox fuera del pacto. Casado o va a ser el gallo, el único gallo, del gallinero o quemará la granja.
No acabo de ver como influye el factor VOX en la ecuacion de problemas del PP..el principal problema de Casado es él mismo,no hay que buscar mas alla..un lider acomplejado y un partido que tradicionalmente ha arreglado las cuentas tras un gobierno de izquierda,pero que ha tragado con toda la basura ideologica de los socialistas y comunistas nos ha metido, y meten a calzador..mucho se podria decir de la politica madrileña,aparte de que es un microsistema politico muy particular,sueño humedo y dorado de la izquierda ( que sigan soñando)..y tambien mucho se puede decir del traidor Almeida, un tipejo mas parecido a Rajoy que a otra cosa,dispuesto a traicionar el pacto que firmo con VOX y que iba en su programa,la derogacion de Madrid Central..una barbaridad de los radicales anticoche de Carmena..le decia al principio que no entiendo la importancia que le dá ud a VOX..un partido que no ha pedido nada,y sillones menos, y que ha dado su apoyo a los populares a pesar de los desplantes de Ciudadanos..es cierto,que otro gallo muy distinto va a cantar en las proximas elecciones andaluzas,y castellanoleonesas,cuando el nefasto y traidor Cs desapareza y el PP quede con el culo al aire,mencion aparte merece la vicealcaldesa de Madrid,la sra Villacis,la mayor traidora de reino y artifice del pacto antinatura de Almeida con los carmenistas,unos oprtunistas que solo buscan sobrevivir en el ecosistema politico madrileño,eso es muy viejo ya y no lo inventaron ellos..a Villacis la perderemos de vista si Dios quiere en año y medio,y de Almeida,como le dijo Ortega-Smith cuando supo del pacto con los carmenistas.." sr Almeida,en las elecciones nos veremos..hasta que todo quede dilucidado,el sr Casado puede hacer algun caballito y pirueta politica,pero todo el mundo sabe que sin en las proximas elecciones no gana el bloque de la derecha,sera culpa suya, y se convertira en un mal recuerdo
ResponderEliminarParece que no les ha sentado bien, pero Casado ya ha decidido y ya veremos quien se lleva el gato al agua.
ResponderEliminarTengo la sensacion de que ud,y Casado tampoco, no se ha enterado de como han cambiado las reglas del juego,y que siguen instalados en el bipartidismo..y el bipartidismo,por mucho que lo anhelen en nel Pp y en el PSOE se ha acabado,igual que las mayorias absolutas..mas vale que lo vayan asimilando..y creo que hay mucha gente en el PP,salvo Rajoy,Casado y Garcia Egea,que tambien lo tienen claro..en el futuro,no habra gobierno municipal,autonomico o municipal de derechas sin VOX..por mucho que los ninguneen, los ignoren en las telepesoes y pptvs de turno..por mucho que los demonicen en periodicos rastreros comprados tambien por gobierno y PP..da igual,VOX no hace otra cosa mas que subir..mire,lo tiene muy claro alguien con quien tengo poca afinidad politica como es Iñigo Errejon,el otro dia dijo que apelar al miedo al la extrema derecha ya no sirve de nada, y tratarlos como los estan tratando los demas partidos politicos es todo un regalo,pues los de Abascal no hacen mas que subir..mire,no quiero desilusionarlo,VOX ha venido para quedarse y quien sabe si de seguir Casado `por esta linea no acabaran llevandose por delante al PP..VOX fue muy necesario todos estos años,pero no existia..el miserable de Rajoy no habria hecho lo que hizo,poniendonos a los pies de los comunistas,ni habriamos tener que ver muchas barbaridades que vimos,empezando por los independistas..y pierdan la esperanza,habiendo un partido de derechas pata negra nadie que los haya votado volvera a votar a los acojonados del PP..como ud bien dice,el tiempo es un juez insobornable..FELIZ AÑO NUEVO Sr Suarez,mis mejores deseos para ud y los suyos,de todo corazon
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