.jpg)
¿Cómo calificar las
privatizaciones de empresas públicas rentables que acometieron los Gobiernos de
Felipe González y, sobre todo, José María Aznar?. Gas Natural, Endesa,
Aceralia, Telefónica, Repsol, Iberia, Red Eléctrica Española, y un larguísimo
etc son testimonio de cómo se ha desmantelado el patrimonio público en
beneficio de unos pocos poderosos. Bajo la falacia de que para estar en la UE
había que privatizar, los Gobiernos socialistas y populares vendieron nuestras
mejores empresas (las verdaderas joyas de la Corona) a precios de saldo en una
macrooperación solo comparable a la que aconteció en Rusia bajo el mandato del
etílico Yelsin. No se saben cuáles han sido todas las “mordidas” y todos los
beneficiarios, pero sí que los citados expresidentes y varios de sus ministros
han sido empleados por las mismas empresas que ellos privatizaron en puestos
sin operatividad alguna, pero muy bien remunerados.
El “pelotazo” del ladrillo fue
otro de los robos de escándalo que hemos sufrido. Constructores y bancos
hicieron su agosto a costa de hipotecar de por vida a los ciudadanos para que
pudieran acceder al derecho constitucional a una vivienda digna. Cuando estalló
esa burbuja otra vez nos volvieron a atracar con el rescate bancario que
estamos pagando entre todos, con altos intereses, vía Deuda.
Algunos ni siquiera buscaban
coartadas ideológicas o foráneas para despojarnos de nuestros bienes. El
presidente socialista Zapatero, el mas grosero en este arte, vendió casi la
mitad del oro del Banco de España para sufragar sus ocurrencias electorales,
como los 2.500 euros por nacimiento, sin discriminación de renta, la rebaja de
400 euros del IRPF, u ordenadores para todos. D. José Luis compraba nuestro
voto con nuestro propio dinero.
Pero, sin duda, el mayor
escándalo al que hemos asistido en los últimos años, todavía mas grande que el
timo de Las Preferentes, ha sido la gestión de las Cajas de Ahorros y como los
que se sentaban en sus consejos de administración, políticos y sindicalistas
que no tenían ni idea de como se dirige un banco pero que cobraban salarios y
dietas de infarto, las echaron a pique. Para sanear las entidades financieras públicas
hubo que recurrir a las fusiones y a un rescate de cerca de 40.000 millones de
euros, que pagaremos nosotros, nuestros hijos y nuestros nietos con sangre,
sudor y lágrimas.
La razón de ser de las Cajas de
Ahorros, servir al bien social, ha desaparecido por completo, pero, después de
ser reflotadas con dinero público ya se anuncia que empezarán a ser
privatizadas en breve. Bankia es la pera en dulce para los ladrones. 20.000
millones de euros han sido necesarios para sanearla y de eso se ha encargado José
Ignacio Goirigolzarri, consejero delegado del BBVA hasta anteayer. Como muy
bien ha dicho el coordinador general de IU, Cayo Lara, refiriéndose a que el
Gobierno de Rajoy también ha encargado a la empresa Goldman Sachs el
asesoramiento para la privatización de Bankia: “han puesto a la zorra a cuidar
las gallinas”.
Nos seguirán robando hasta que
digamos basta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario