
Tras el inicio de conversaciones en la capital Noruega, también se ha llegado al compromiso de que éstas continúen en Cuba, "con la aspiración de no levantarse de la mesa hasta suscribir un pacto de paz".
Han sido largos meses de contactos preliminares secretos donde Venezuela, Noruega y, sobre todo, Cuba, han puesto mucho de su parte para convencer a unos y otros de la necesidad de acabar con el conflicto, por el bien de Colombia y de todo el área del Caribe.
También hay que agradecer el cambio en la política gubernamental colombiana que ha imprimido el presidente Juan Manuel Santos, que ha terminado con los crímenes de los paramilitares y ha purgado a algunos de los generales mas sanguinarios.
Esperan jornadas de muchas dificultades y seguro que habrá zancadillas de los que no tienen como prioridad la paz y el bienestar de los colombianos. Pero se ha puesto la primera piedra, con mucho esfuerzo y también con mucha esperanza.
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