Ya estamos escuchando en diversos medios lo malo que era Al Gaddafi, el dictador libio y que hay que entregarlo al Tribunal Penal Internacional, ese ente del imperialismo al que, por cierto, ni se sujetan ni reconocen EE UU, Rusia y China. Nada nos dicen, sin embargo, de los dictadores amigos, de nuestros hijos de puta, como gusta decir a los norteamericanos.
Pero, hasta anteayer, se compadreaba y se negociaba con Al Gaddafi, hasta que surgió, al calor de las revueltas árabes, la oportunidad de intervenir y quedarse con el petróleo libio. ¿Qué tribunal va a juzgar los crímenes de la OTAN en Irak, Afganistán y Libia?.
No vamos a perder mas tiempo con argumentos. Como se suele decir, una imagen vale mas que mil palabras. Ahí tiene usted unas cuantas.
Pero, hasta anteayer, se compadreaba y se negociaba con Al Gaddafi, hasta que surgió, al calor de las revueltas árabes, la oportunidad de intervenir y quedarse con el petróleo libio. ¿Qué tribunal va a juzgar los crímenes de la OTAN en Irak, Afganistán y Libia?.
No vamos a perder mas tiempo con argumentos. Como se suele decir, una imagen vale mas que mil palabras. Ahí tiene usted unas cuantas.
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