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¿De verdad cree usted que Asturias, la tierra de Loranto, Asuro y Gausón, los tres capitanes astures contra los romanos; la patria de los que iniciaron la lucha  de liberación contra el imperio musulmán, dando un giro a la historia de Europa; el reino de doce reyes; la sede de la Junta Suprema que se atrevió, la primera, a declarar la guerra a Napoleón, entonces el tirano de Europa, empezando la Guerra de la Independencia, es menos "nacionalidad histórica" que otras? ¿De verdad hay alguien, en su sano juicio, que se atreva a zaherir a su propia madre, a la madre de Jovellanos, soslayando las enseñanzas del pasado? Otros lo han hecho a lo largo de la Historia, alguna vez les salió bien, pero en la mayoría de las ocasiones les salió muy mal. 

Mientras en Bruselas populares y socialistas se reparten los cargos y los sueldos, muy imprudentemente, y desde España, en consenso, envían armas y tropas a los países del este, bajando cada día un peldaño más hacia el abismo, esto ya lo han dejado como un erial. Son tantas las fechorías que entre unos y otros han cometido a lo largo de las pasadas décadas que necesitaríamos una enciclopedia completa para documentarlas. Pero, a pesar de todo lo que hemos visto y de todo el daño que han hecho los políticos españoles durante los últimos 45 años, nadie ha sido tan descarado como Pedro Sánchez, como estamos viendo. Cuando se negoció la Constitución de 1978, hubo un tira y afloja entre el antiguo y el nuevo régimen, y aunque algunos idealistas dicen que debió haber una verdadera ruptura, yo no creo que no haberla fuera malo del todo. Lo que si creo que fue del todo malo es que hubiera gente negociando, y chantajeando, con la independencia y/o con la pistola debajo de la mesa, y de aquellos polvos, estos lodos. Por eso hubo falsas "nacionalidades históricas" y tratamientos fiscales de favor. Cuanto más grosero fue el chantaje mayores fueron los beneficios, digámoslo alto y claro. A la gente no le dijeron la verdad, porque hay verdades que son más corrosivas que el vitriolo, y la han seguido engañando.

Sin que nadie haya explicado a los asturianos el porqué, hay CC AA en España donde sus residentes tienen más derechos que nosotros, donde tienen una financiación de privilegio y donde, a pesar de ello, nos insultan un día sí y al otro también. De facto, esas comunidades autónomas ya son otro país, salvo para chupar del resto como sanguijuelas o para jugar la Liga Española de Fútbol. Los que en el 78 no negociaron con la pistola debajo de la mesa, ahora amenazan con referéndums, con toma de aeropuertos, carreteras y estaciones de ferrocarril, con atacar a la Policía y a la Guardia Civil y con golpes de Estado, pero, con lo que más amenazan es con quitar el apoyo parlamentario a Sánchez y a la pseudoizquierda en el Congreso de los Diputados ¿Quiénes son, pues, los mayores culpables para usted  de lo que está pasando en esta ecuación?

Tras los indultos, vino la amnistía y como los chantajistas se han dado cuenta de que, por mantener el sillón, algunos son capaces de todo, ahora quieren dinero, mucho dinero. Quieren que los españoles paguen su estratosférica deuda, producto del despilfarro de dinero púbico en cientos de chiringuitos, organizar consultas y llenarse los bolsillos. Como la "financiación singular", porque ellos lo valen, no cuela, ya se están preparando otras definiciones engañabobos. Los socialistas son muy buenos con esas cosas (recuerde usted lo de "OTAN, de entrada no") y Sánchez tiene cientos de asesores y palmeros para las ocurrencias dialécticas, así que prepárese usted para alucinantes eufemismos.

El dinero, la pasta gansa, es la verdadera causa del proceso independentistas catalán, todo lo demás son adornos y fuegos artificiales. Es la caja lo que quieren, el resto, en verdad, les importa muy poco. Para obtener eso no sirve ni el "café para todos" ni una nueva financiación en igualdad de premisas y condiciones para todas las CC AA. Y, por supuesto, para poder hacer uso discrecional de ese dinero hace falta tener el gobierno. Así que los independentistas, además, del dinero, querrán la presidencia de la Generalitat, aunque ni han ganado las elecciones ni tienen mayoría parlamentaria ¿Se lo darán los socialistas?

Hemos llegado a un punto en que no está claro lo que van a hacer otras CC AA, gobiernen en ellas socialistas o populares, pero en el que Asturias no puede volver a pasar otra vez por el aro. Que Barbón se ponga al frente, y no esgrima cuentos chinos para ponerse de perfil, o no solo va a peligrar el puesto del inquilino de La Moncloa.